La ampaña Gutxigasta, puesta en marcha por el EVE, simboliza a aquellas personas que en su día a día tienen en cuenta el valor de la energía y la importancia de consumirla en su justa medida, sin despilfarrar y pone en valor el compromiso individual de las personas con el uso responsable de la energía.

Para el Ente Vasco de Energía, eficiencia es un concepto de importancia capital cuando se trata de energía "ya que pretende mejorar el uso que hacemos de la misma", es decir, disfrutar del mismo bienestar y cubrir las necesidades pero consumiendo la menor cantidad posible. Ello contribuye al sistema con una menor necesidad de recursos y una mayor sostenibilidad. Por tanto, por eficiencia se entiende consumir solo lo necesario, y es aplicable en todos los ámbitos y sectores, tanto desde la industria y la empresa como en los actos diarios y cotidianos de toda la ciudadanía. Precisamente, esta campaña pretende actuar en este ámbito, en la conciencia individual como motor y estímulo de una nueva cultura, basada en el compromiso individual reflejado en el concepto Gutxigasta, al bienestar colectivo.

Este objetivo de sostenibilidad también está refrendada por las políticas energéticas del Gobierno Vasco que tienen una incidencia directa en un menor consumo energético. Si bien el año 2020 ha sido un periodo excepcional debido a la pandemia del covid, las actuaciones inducidas a través de los programas de ayuda del EVE han tenido un resultado directo en la reducción del consumo de energía, tanto en sectores productivos como en los propios hogares. Según estimaciones, se calcula que los programas de subvenciones a proyectos en eficiencia y renovables impulsados por el Ente Vasco de Energía lograron en 2020 un ahorro equivalente al consumo anual de aproximadamente 16.000 viviendas.

A 31 de diciembre de 2020, los programas de apoyo a actuaciones en eficiencia energética habían logrado un ahorro acumulado de 6.657 tep/ao, (toneladas equivalentes de petróleo), es decir, la energía que consumirían, por ejemplo, cerca doe 9.000 viviendas durante un año. Todo ello gracias a más de 2 millones de euros de subvención adjudicadas a proyectos de mejora que han invertido cerca de 24 millones de euros.

También los programas de apoyo a las renovables han contribuido a ello con la puesta en marcha de nuevas instalaciones cuya producción de energía sustituye directamente a otras fuentes más contaminantes. Así, y con los programas aún vigentes, hasta final del año pasado se apoyaron más de 560 instalaciones que con una subvención de 3,2 millones de euros, ya aportan un ahorro en energía convencional superior a los 5.000 teps, energía suficiente para abastecer el consumo de 7.000 hogares.