Vitoria. LAB ha denunciado que los despidos anunciados por la dirección de Tubacex no responden a razones económicas sino a una "estrategia empresarial" para implantar un modelo de relaciones laborales que le permita "contar con trabajadores baratos", por lo que ha pedido al Gobierno Vasco que garantice el mantenimiento del empleo.

En un comunicado, este sindicato ha respondido al anuncio del grupo de recortar 500 empleos para reducir los costes laborales en un 20 %, debido a la caída de su mercado en un 50 %, agravada por la crisis generada por el coronavirus.

La central ha considerado que "ni el coste de personal ni la situación generada por la covid son las razones que llevan a Tubacex a plantear esta destrucción de empleo" que, según teme el sindicato, irá acompañada de un empeoramiento de las condiciones laborales.

Detrás de los despidos, a su juicio, está la intención de la empresa, con plantas en las localidades alavesas de Amurrio y de Llodio, de impulsar otro modelo de trabajo y de relaciones laborales que le permita "contar con trabajadores flexibles y baratos". "Queda claro que esta reestructuración obedece a una estrategia empresarial y no a razones económicas", ha considerado.

En este sentido, ha indicado que la empresa tiene una situación económica "lo suficientemente saneada" para garantizar el futuro de la planta "sin necesidad de iniciar ningún proceso de reestructuración" y ha hecho hincapié en que Tubacex se une al grupo de empresas "que van a aprovechar la situación generada por la covid-19 para llevar adelante sus planes estratégicos".

Por ello, la central ha advertido de que no va aceptar "ningún despido ni ningún acuerdo que suponga pérdida o rebaja de derechos de la plantilla en Tubacex", tras lamentar que la empresa haya hecho público el anuncio de despidos sin esperar a la reunión que la dirección mantendrá mañana miércoles con los comités de empresa de las factorías de Amurrio y de Llodio.