El Euribor ha vuelto a bajar tras las subidas de marzo, abril y mayo, y se sitúa en una media del -0,141%, a falta de un día para el cierre del mes. Pero esta buena noticia para los hipotecados no lo es tanto, ya que aquellos que tengan una revisión de su préstamo referenciado a este indicador hipotecario verán un encarecimiento de las cuotas que pagan al banco.

¿La explicación? "El tipo de las hipotecas variables se actualiza cada seis o cada 12 meses y el índice cotiza en junio por encima del valor que registró hace un semestre (-0,261%) y hace un año (-1,900%). Así, como se les aplicará un interés mayor, tendrán que pagar unas mensualidades más altas hasta la próxima revisión", señala el comparador bancario HelpMyCash.com.

El encarecimiento dependerá del importe y el plazo del préstamo revisado. En el caso de una hipoteca tipo de 150.000 euros a 25 años con un interés medio de euríbor más 1%, las cuotas pasarían de los 547,76 a los 555,79 euros con una revisión semestral y de los 552,50 a los 555,79 euros con una anual. En consecuencia, habría que pagar un total de 48,18 euros más en los próximos seis meses o de 39,48 euros más durante el siguiente año, según el cálculo de HelpMyCash.com.

De cara a los próximos meses, la previsión es que esta referencia se mantenga o baje más. Según el Departamento de Análisis de Bankinter, lo más probable es que cierre 2020 con una cotización de entre el -0,27% y el -0,17%, mientras que para 2021 se situará entre el -0,15% y el -0,05%. A más largo plazo, la mayoría de los expertos consideran que su valor seguirá cerca del 0% durante los próximos cinco años.

¿Vale la pena hipotecarse a tipo variable?

Ante la previsión de que el Euribor siga bajando, ligarse a este índice "puede ser conveniente si se devuelve el dinero en unos 10 o 15 años, pues se pagaría muy poco en intereses. Para plazos más largos, la decisión dependería de la tolerancia al riesgo del cliente, pues es imposible saber cuál será la cotización de esta referencia dentro de 20 o 30 años", explican desde el comparador.

En cualquier caso, aconseja antes de contratar una hipoteca variable comparar ofertas y quedarse con la que tenga un menor diferencial (lo que se suma al índice de referencia para calcular el interés) y menos gastos adicionales.