bilbao - Ribeiro de Menezes participó ayer en unas jornadas organizadas por la Cámara de Comercio de Bilbao y el Banco Caixa Geral sobre oportunidades de negocio en Portugal y los seis países africanos lusófonos. Las exportaciones portuguesas a Euskadi crecieron un 15% el año pasado y pueden hacerlo mucho más si se incide en actividades comunes.

Además de ‘vender’ su país, acude a Bilbao para poner en el mapa de la inversión a las antiguas colonias portuguesas en África.

-Desde luego nos interesa aprovechar estas oportunidades para dar a conocer lo que es Portugal y las posibilidades que tenemos como destino de inversión y para acercar a los empresarios de los dos países. Pero nos hemos dado cuenta también de un interés creciente por lo que es el África lusófona, y tenemos la buena fortuna de mantener unas relaciones estupendas con nuestros amigos africanos que hablan portugués, por las que fueron nuestras colonias.

¿Son fuertes las relaciones?

-Sí, es una relación que se basa en la confianza y en la proximidad política. Tenemos muchas empresas que trabajan en esos mercados y creemos que debemos animar a los empresarios españoles a hacerlo. Y hacerlo en cooperación, con capital español y portugués, para tener muchas más opciones de éxito con un beneficio claro para todos. Estamos visitando muchos lugares con este mensaje. Grano a grano vamos dejando semillas, como estas de Bilbao, que esperamos que puedan prosperar.

¿Cuál es la relación económica de Euskadi con Portugal?

-Hay empresas portuguesas grandes en el País Vasco, por supuesto EDP, la farmacéutica Bial o todos los bancos que operan en el Estado español, entre otros. Los datos son esperanzadores sobre todo porque están creciendo. De enero a noviembre, las exportaciones portuguesas hacia Euskadi aumentaron un 15,5%. Euskadi exportó hacia Portugal 800 millones de euros, es el séptimo cliente de Portugal en España con el 4% del total de compras. Y es el octavo proveedor de Portugal, con el 5% del total.

¿Dónde están las oportunidades de negocio?

-Hay complementariedades sobre todo en el sector industrial, pero hay incluso un interés en el turismo. Lo importante es que tenemos potencial para ir más allá. Hay que darse cuenta de que España vende más a Portugal que a América Latina en su conjunto. Estamos hablando de unos 18.000 millones de euros el año pasado. Y con la base industrial, que es una de las características importantes de la economía del País Vasco, podemos trabajar más y cooperar en I+D, en la industria aeronáutica y del automóvil e incluso en el sector de los fármacos. Además, Bilbao está muy volcada al mar y la industria naval, desde los astilleros a todas las actividades que tiene relación con la construcción de buques. Es algo que en Portugal afortunadamente también tenemos y de este tipo de contactos pueden surgir ideas para cooperaciones futuras. Los niveles actuales están bien y están mejorando, pero podemos ir más allá en las relaciones económicas entre Portugal y el País Vasco.

¿Y en cuanto a las posibilidades de negocio en el ‘área Palop’ [países africanos de habla portuguesa]?

-Cada país tiene su historia, cada mercado tiene sus dimensiones. Si nos concentramos en los países más grandes, tenemos a Cabo Verde con una situación política muy estable y una relación económica muy desarrollada con la Unión Europea. Tenemos a Mozambique con un futuro inmenso, porque tuvo la buena fortuna de descubrir la dimensión de recursos en petróleo y gas. En Angola hay un modelo de desarrollo sostenido durante años en las industrias extractivas, sobre todo en Petróleo, pero están mirando hacia otras áreas para diversificar. Son realidades distintas, pero con gran proyección en el futuro.