Bilbao - Telefónica denunció que un “doble sabotaje” dejó ayer incomunicadas a cerca de 10.000 personas entre Plentzia y Gorliz. La causa fue un doble corte de los cables de fibra óptica, que dejaron desde las tres de la tarde de ayer sin servicio de teléfono, voz y de datos a esos clientes afectados, según la compañía, que preveía restablecer la línea anoche. La empresa achaca estos ataques a los técnicos de contratas, subcontratas y autónomos que trabajan para Telefónica-Movistar y que llevan en huelga cincuenta días.
Telefónica anunció además que ha presentado las correspondientes denuncias por los sabotajes, mientras intenta localizar los últimos cortes de sus líneas, sin que se haya podido precisar cuándo podrán recuperar sus comunicaciones los vecinos afectados ayer.
Según la información facilitada por Telefónica los cortes se produjeron en las dos líneas que llevan los servicios de comunicaciones a Plentzia y Gorliz, una llega desde Mungia y la otra desde Sopela. Si falla una se usa la otra, pero ayer se inhabilitaron ambas, motivo por el que los usuarios particulares e instalaciones como el hospital de Gorliz quedaron incomunicados. Además, los problemas afectan a servicios especiales como los de teleasistencia, según la compañía.
Desde que comenzó este conflicto entre Telefónica y sus empresas subcontratadas, Cotronic en Gipuzkoa y Elecnor y Confica en Bizkaia, Telefónica ha presentado más de 350 denuncias ante la Ertzaintza, incluidas amenazas a trabajadores que no secundan el paro y ataques a sus coches particulares. La empresa estima también que se han producido 9.000 averías no atribuibles a causas habituales. Además hay en torno a 7.000 personas en diferentes zonas de Bizkaia, como Enkarterri, sin acceso a las líneas de teléfono fijo e Internet todavía. - Efe / E. Press
