BILBAO - El ligero repunte del gasto en alimentación en el primer semestre en el conjunto del Estado español, un aumento del 0,1%, tras varios ejercicios a la baja, y la misma tendencia contabilizada en el comercio minorista en general con un alza del 0,2%, allana el camino para el despegue del grupo vasco de distribución comercial Eroski. La cooperativa ha cerrado hace un mes el proceso de reestructuración de la deuda, una vez alcanzado un acuerdo con las diferentes entidades financieras para refinanciar los 2.605 millones de euros de deuda que arrastraba el grupo cooperativo que preside Agustín Markaide.
El crecimiento de la economía, que ha alcanzado tasas de incremento del PIB del 1,2% en el Estado permitirá a Eroski poner en valor su nueva estrategia comercial y volver a la senda positiva en los próximos meses. También ayudarán las previsiones de incremento de las ventas en el sector de la distribución de entre el 3 y el 4%, según Cesce, para este año, tras crecer el gasto en alimentación un 0,6% en 2013 hasta llegar a 101.250 millones de euros,
El nuevo plan de negocio que pasa por concentrarse, sobre todo, en los territorios en los que el Grupo Eroski cuenta con una mejor posición competitiva, -Galicia, Euskadi y Catalunya y sus respectivos hinterlands-; profundizar en el comercio de proximidad; en productos más sanos y en desarrollarse y expandirse mediante la fórmula de franquicias, Para focalizarse en esa estrategia la compañía vasca ha tenido, primero, que cerrar con éxito el frente financiero pues arrastraba una deuda importante originada en los años de crecimiento y expansión del grupo.
La cooperativa Eroski ha alcanzado hace un mes un acuerdo con los principales bancos acreedores para la reestructuración de la deuda de 2.605 millones de euros, con lo que considera despejado el horizonte financiero para los próximos años lo que le permitirá volcarse en el cumplimiento del plan de negocio elaborado.
El grupo cooperativo vasco con sede en la localidad vizcaina de Elorrio ha realizado un notable esfuerzo de gestión en los últimos ejercicios para mejorar los resultados y el balance del grupo.
De hecho, la entidad, un grupo de distribución comercial que factura más de 5.800 millones de euros al año, consiguió mejorar sus resultados en el pasado ejercicio en medio de una coyuntura adversa, con el consumo a la baja, e incrementar el Ebitda de 264 a 269 millones de euros.
La mejoría de la situación general del consumo ayudará a Eroski a desarrollar su negocio y poder afrontar con las mayores garantías sus compromisos con el sector financiero. Como se recordará el acuerdo alcanzado con los bancos define la reestructuración de la deuda de la cooperativa integrada en la Corporación Mondragón hasta 2019.
Los responsables de Eroski, han pactado las condiciones con las ocho principales entidades financieras acreedoras, que representan el 85% de la deuda bancaria que tiene la cooperativa, aunque el acuerdo ha sido compartido con el resto de los bancos cerrando una dura negociación que se ha extendido durante más de ocho meses
Las entidades financieras con sede en Euskadi, -BBVA, Laboral, Kutxabank y Bankoa concentran más de 800 millones de los créditos pendientes de Eroski.
El acuerdo de refinanciación ha ligado los pagos a la evolución económica de la compañía lo que demostraría, según recuerdan los responsables de Eroski, el total respaldo de la banca al modelo de negocio de la compañía.
No hay que olvidar que el grupo cooperativo Eroski en los últimos cinco años, sumido en una crisis económica sin precedentes en medio siglo, ha amortizado más de 1.200 millones de su deuda, un elemento que sin duda ha influido positivamente en que la banca haya aceptado el acuerdo de refinanciación de los préstamos. Esa capacidad de amortización supone una garantía de que el grupo podrá hacer frente a los compromisos adquiridos para el futuro.
El presidente de Eroski, Agustín Markaide, recordó tras que el acuerdo alcanzado con la veintena de entidades financieras implicadas suponía el inicio de una nueva etapa para el grupo de distribución comercial vasco. La cooperativa afrontará los retos definidos en el plan estratégico con las tranquilidad de tener las necesidades financieras cubiertas pues se mantienen las líneas de circulante por importe de 375 millones de euros que la cooperativa viene utilizando para su actividad normal.
El acuerdo permite a la empresa centrarse en su negocio de distribución, realizar las desinversiones precisas en el momento oportuno y contribuye a materializar el proyecto estratégico de Eroski, basado en “un comercio responsable” y en la continuidad del modelo cooperativo.
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