Gernika-lumo. Con igual número de empleados que cuando cerró sus puertas hace dos meses, las firmas de Servicios de Mesa y Cumenager de Gernika-Lumo reiniciarán hoy su actividad laboral. Lo han hecho al confirmarse la compra, ayer mismo, de ambas estructuras por parte de la firma cántabra Rhointer-Cantra.

Como ya adelantara DEIA en diciembre, la entrada del grupo empresarial permitirá dar continuidad durante los próximos años a 43 puestos de trabajo -32 de ellos serán ocupados por los antiguos empleados, ya que algunos han optado por otras posibilidades- de las firmas herederas de las marcas Dalia, Cruz de Malta y Meneses. Servicios de Mesa y Cumenager cesaron su actividad en noviembre tras encadenar sucesivas caídas en su facturación y entrar en un proceso de liquidación. El juzgado número dos de lo mercantil de Bilbao se ha decantado por la oferta de Rhointer-Cantra.

Fuentes conocedoras del proceso aseguraron que el grupo cántabro, además de hacerse cargo del mantenimiento del volumen de empleo y varias inversiones acordadas en un Plan Industrial, ha debido abonar a la administración concursal 205.000 euros en metálico para la adjudicación de las firmas gernikarras, además de hacerse cargo de la deuda hipotecaria que estas tenían con Bankia por las instalaciones de 7.500 metros cuadrados en el polígono de Txaporta, de en torno a los 3,4 millones de euros.

La nueva empresa utilizará tres marcas cuberteras con sello gernikarra bien posicionadas en el Estado, y aportará a la fábrica todo el mercado americano, ya que la firma cántabra está presente en 11 países. Así, es previsible que la empresa multiplique la producción de cubiertos, que será la actividad a la que se dedicará exclusivamente al igual que lo hace desde 2005. Asimismo, Cantra ha adquirido recientemente la marca Magefesa para comercializar sus productos en el Estado con excepción de los cubiertos, labor que podrá desarrollar en adelante a través de las marcas gernikarras.

La entrada de la firma también permitirá desarrollar ideas para mejorar la producción y que hasta ahora no se habían podido llevar a cabo por falta de dinero. En esta línea, han desvelado que Rhointer-Cantra ha aprobado un Plan Industrial con inversiones de más de medio millón de euros, para hacer mejoras de manera progresiva. "Las primeras inversiones serán unas máquinas de grabado de diamante y láser, así como máquinas de empaquetado, labor que se hacía a mano; hay un presupuesto para hacer troqueles nuevos y fabricar las piezas de forma más competitiva?", han señalado desde la firma. La principal apuesta será realizar una fabricación mucho más efectiva y poniendo especial énfasis en la calidad, imagen, con diseños nuevos de cubiertos, envoltorios o estuches, entre otros. A ello hay que añadir otras inversiones como un plan de cambio de desengrases para emplear detergentes más modernos que no generen residuos.

Asimismo, la firma cántabra suscribirá una capitalización de la empresa de medio millón de euros y aportará otro tanto para restablecer los niveles de circulante precisos para el buen mantenimiento de la actividad.

Implicación

Para que se haya producido este feliz desenlace ha sido vital "la firme voluntad de los trabajadores de sacar este proyecto adelante, manteniendo una fuerte implicación personal, apoyados, en todo momento, por las centrales sindicales y la Diputación vizcaina", se felicitan desde la firma. El ente foral ve satisfecha su apuesta por mantener las actividades en el sector cubertero de Gernika y atajar así la pérdida de empleo que padece Busturialdea. La Diputación de Bizkaia venía trabajando en reflotar la planta desde marzo de este año con contactos a varios niveles.