GASTEIZ. Pardos ha hecho estas declaraciones, un día después de que la vista previa por esta demanda celebraba ayer en los juzgados de Bilbao acabase con la decisión del juez de dar un plazo de 40 días a las partes para que intenten llegar a un acuerdo extrajudicial en esta denuncia colectiva de Adicae y 73 particulares.
Ha reconocido que en la vista de ayer hubo "muchas contradicciones" que se reflejaron en "informaciones no exactas" como la que apuntaba a una posible retirada de la denuncia de la asociación.
Por ello, ha indicado que Adicae "no va a retirar sin más la demanda interpuesta", ya que siempre defenderá lo que sea más adecuado para las personas que defiende, "sin ninguna animadversión hacia la cooperativa vasca".
No obstante, Pardos ha recordado que estaría "encantado" de poder echar atrás la demanda porque supondría que se habría alcanzado una "solución dialogada" entre las partes, ya que las judiciales son "costosas, muy largas y no responden del todo a un problema tan grave".
Preguntado por si los abogados de Eroski asustan a los perjudicados diciéndoles que si las subordinadas son anuladas la empresa entraría en concurso de acreedores, Pardos ha explicado que, más allá de que esta afirmación sea cierta o no, "es un argumento manido que usan los bancos como presión a los afectados".
En cuanto a la postura de BBVA, ha opinado que podría estar dispuesto a llegar a un acuerdo, porque ya lo ha hecho antes con sus propias preferentes.
En todo caso, Pardos ha defendido que la solución a este contencioso debería pasar por una "fórmula institucional pactada con los emisores para resolver universalmente el asunto", en la que además de las instituciones Eroski y BBVA, participasen también las organizaciones de consumidores.
"La mediación es una medida muy 'light' porque para que dos medien hace falta que quieran, mientras que el arbitraje es bueno pero limitado", ha señalado.
También ha opinado sobre la propuesta de Ausbank para que los afectados presenten demandas individuales en lugar de colectivas. Pardos la ha rechazado porque "decir a 40.000 familias que vayan de uno en uno con el carné en la boca nos parece interés de negocio de la asociación y de abogados particulares".
"Es absurdo", ha continuado Pardos, quien ha indicado que no discute la libertad de cada ciudadano en cada caso, pero ha insistido en defender la fórmula de la "justicia colectiva" y ha agregado que, además, si se presentasen denuncias individuales "la Justicia ahora colapsada entraría en coma".
Para que este tipo se situaciones no vuelvan a repetirse, a su juicio, no será suficiente con más y mejor información para los usuarios, sino que son precisas más medidas de vigilancia y control por parte de los organismos supervisores de estas emisiones.