BILBAO. Al actual presidente de la Cámara de Comercio, Industria y Navegación de Bilbao, José Ángel Corres, le ha tocado afrontar el reto de representar a la más que centenaria institución vizcaina en una de las coyunturas más adversas en décadas, no solo por efecto de la crisis económica sino por el cambio normativo aprobado hace un año por el Gobierno español que suprimió la obligación, por parte de las empresas, de cotizar a las Cámaras de Comercio. Ello ha generado una caída de ingresos para dichas instituciones camerales que va a suponer "la desaparición de algunas de ellas y la transformación de la mayoría", afirma el presidente de la Cámara de Bilbao.

José Angel Corres (Bilbao 1959) es licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad Comercial de Deusto y cursó estudios en el Instituto de Economía Marítima y Logística de Bremen (Alemania) con una beca de la Escuela de Administración Marítima.

Tras trabajar varios años como director comercial de Pinturas Internacional fue nombrado gerente del Depósito Franco de Bilbao, puesto que dejó al ser designado presidente de la Autoridad Portuaria de Bilbao en julio de 1996, cargo en el que se mantuvo hasta junio de 2009.

Desde 2002 ha pertenecido al Pleno de la Cámara de Bilbao como vocal cooperador, participando también en la Comisión de Navegación hasta que el pasado 26 de marzo de 2010 fue elegido presidente de la Cámara de Comercio, Industria y Navegación de Bilbao.

¿Cómo se presenta 2012 para la Cámara de Comercio de Bilbao?.

La institución cameral refleja la situación de sus asociados y de las empresas de Bizkaia. Por lo tanto ve el próximo año con los mismos ojos que la mayoría de las mismas. Con los datos que tenemos a día de hoy, 2012 se presenta como un año triste por no decir malo. En el caso concreto de las Cámaras de Comercio hay que tener en cuenta que la crisis se agudizó hace un año cuando el Gobierno Zapatero decidió la supresión del recurso cameral permanente. Ello nos ha dejado sin esos ingresos que era claves por lo que estaremos en la peor de las situaciones posibles.

¿Qué medidas de ajuste presenta el nuevo plan estratégico de la Cámara de Bilbao para adecuarse a la nueva situación?

Hemos tenido que adaptar el plan estratégico 2012-2014 que estábamos preparando a este nuevo escenario en el que los ingresos se han reducido sustancialmente. Y las primeras medidas han ido encaminadas a reducir los gastos. Hemos vendido el edificio de Gran Vía 13, lo que además de suponer unos ingresos notables nos permite racionalizar nuestras estructuras, concentrando todo en las instalaciones de Alameda Rekalde 50 con el consiguiente ahorro de costes. Como esto no es suficiente hemos decidido suprimir el centro de negocios porque generaba unas pérdidas que antes podíamos sufragar con las cuotas pero ahora no, y queremos mantener los servicios fundamentales que prestamos a las empresas. Estamos abandonando Digipen Europe y posiblemente realicemos alguna desinversión más.

¿El ajuste afectará también a la plantilla de la Cámara de Comercio de Bilbao?.

Sí. La institución cameral es básicamente una empresa de servicios por lo que el gasto de personal se lleva la mayor partida del presupuesto. Así las cosas, la plantilla también tendrá que adecuarse a la nueva realidad económica. El horizonte del ajuste está en 2014 cuando acaba nuestro mandato y se trata de dejar al equipo siguiente una institución económicamente viable. Ello supone que se contemple una reducción de plantilla de las 57 personas actuales a 39. Con estas cifras se podría ajustar los ingresos y los gastos. Este ajuste está sin negociar todavía pero a diferencia de otros procesos de reconversión no se podrá recurrir a jubilaciones porque no existe una edad media para ello.

¿Van a seguir prestando los servicios a las empresas y emprendedores de Bizkaia?.

Sí. Parafraseando a un miembro del Gobierno vasco podemos decir que con menos vamos a intentar hacer más y mantener los servicios fundamentales que presta la Cámara de Comercio. Queremos mantener todas las actuaciones previstas, por ejemplo, en una de nuestra labores primordiales que es ayudar a la internacionalización de las empresas y fomentar el comercio exterior.

Además mantendremos la otra seña de identidad de la Cámara que es todo lo relativo a la formación empresarial en un sentido amplio, incluido idiomas etc. Hablamos de prestar un servicio de formación continua.

¿Con las medidas propuestas cerrarán las cuentas del próximo año sin números rojos?.

Sí aunque en 2012 todavía tendremos datos de explotación negativos. La venta del edificio de Gran Vía nos permitirá cerrar el ejercicio con superávit hasta alcanzar el equilibrio presupuestario de forma ordinaria.

¿Hay posibilidad de obtener unos ingresos adicionales?.

Más allá de facturar a las empresas los servicios que les prestemos, es difícil dada la adversa coyuntura económica general. Legalmente tenemos la posibilidad de obtener ingresos por encargos de las administraciones públicas de cualquier ámbito, desde municipales a europeas, por encomiendas de gestión a las cámaras, -una fuente de ingresos que pueden suponer hasta un 40% del total-, pero la realidad es que ahora no es factible porque las administraciones públicas están en fase de recortes presupuestarios. Y no contemplamos establecer cuotas a las empresas.

¿Sin el recurso cameral qué futuro les espera a las Cámaras de Comercio en el Estado?.

Hay de todo. Algunas desaparecerán y otras tendrán que fusionarse. Hay que tener en cuenta que a diferencia de Euskadi donde sólo hay una institución cameral por territorio, en la mayoría del Estado hay más de una por provincia. En Castilla-León, por ejemplo, hay 14; en Cataluña, 9. Está claro que las que vivían solo de las cuotas van a ver desapariciones. Nuestro caso es distinto porque el 60% de los ingresos no dependía de las mismas. Somos, con la de Granada, una de las instituciones camerales con más independencia económica en este sentido. En otros lugares es previsible un proceso de fusiones, con una cierta especialización, o geográfica o de actividades. Lo que es claro es que las 88 Cámaras de Comercio actuales no van a sobrevivir.

¿Se puede producir una fusión de Cámaras vascas en torno a Eusko Ganberak?.

No está previsto. Eusko Ganberak a corto plazo va a seguir igual. Además, por su propia filosofía, Eusko Ganberak nunca va a representar la fusión de las Cámaras vascas. No tiene estructura alguna. Aquí no hay una supraestructura como la que tiene la patronal vasca Confebask. Entre las tres Cámaras de la CAV se dan unas determinadas especializaciones. La navegación es importante en Bizkaia pero, obviamente, no lo es en Alava.

En alguna patronal nunca han ocultado su interés por controlar las Cámaras de Comercio.

Las Cámaras, como la nuestra, tienen 125 años de vida, por no hablar de los 500 del Consulado de Bilbao, y las patronales han surgido, en comparación, hace cuatro días como quién dice y respondemos a unos intereses distintos. La cuota de la Cámaras salía de los beneficios de las empresas. De hecho en Bizkaia, mil y pico firmas aportaban el 90% de los recursos que permitían a 78.000 pymes beneficiarse de los servicios. Las patronales tienen su labor principal en la negociación colectiva y se han beneficiado, al igual que los sindicatos, de unas subvenciones públicas que les ha permitido mantener unas estructuras muy pesadas y poco efectivas cómo se ha demostrado en estos últimos 40 años.