PARÍS. La tasa de paro se mantuvo estable en marzo entre los países de la OCDE, una tendencia general en la que destacan las excepciones de España, Italia, Luxemburgo y Suecia. Así, la tasa media de desempleo de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) se mantuvo en el 8,2 % de febrero, que supuso el cuarto mes consecutivo de caída del desempleo entre los países representados en la organización con sede en París.

"Por primera vez desde el inicio de la crisis financiera en 2007, las tasas de desempleo muestran un patrón estable o en declive en la mayoría de países de la OCDE", destacó la organización, que señaló que en la zona euro, la tasa de desempleo se mantuvo en niveles del 9,9 %. El país con mayor tasa de desempleo de ese grupo 33 Estados fue España, con un 20,7 % de parados, seguido de lejos por de Irlanda (14,7 %).

Los datos que maneja la OCDE se complementan con los domésticos, que sitúan el número de parados en el Estado muy cerca de los cinco millones de personas. Con una cola del paro de esas dimensiones no es extraño que la OCDE tuviera que salir ayer al paso tras una "malas interpretaciones" de sus datos de crecimiento económico.

La organización aclaró que el índice compuesto de indicadores líderes (CLI) para España correspondiente al mes de marzo sigue reflejando un "crecimiento constante" de la economía española por encima de la tendencia a largo plazo.

El indicador compuesto español se situó en marzo en 102,24 enteros, un cifra "ligeramente inferior" a los 102,33 puntos básicos que registró en el mes de febrero.

Sin embargo, la OCDE restó importancia a ese dato y situó al Estado en una parte del ciclo económico similar a la que están atravesando en este momento otras economías, como Francia o el Reino Unido. Las perspectivas generales no han sufrido ningún cambio desde el mes anterior.