El presidente del BBVA afirma que las cajas han acumulado riesgos excesivos

BILBAO. El presidente de BBVA, Francisco González, aboga por la reestructuración urgente del sistema de cajas de ahorros, unas entidades que "no están sometidas a la disciplina y controles de los mercados y que han acumulado riesgos excesivos con una capacidad muy limitada de recomponer su capital". Según señaló el máximo responsable del banco en el transcurso de la Junta General de Accionistas celebrada ayer en el Palacio Euskalduna de Bilbao, las cajas "suponen la mitad del sistema financiero", por lo que para recuperar la confianza de los mercados en la economía de España es "imprescindible completar con rigor y con rapidez el proceso de reestructuración de las cajas".

González, en su intervención en la Junta de Accionistas, siguió la línea habitual de su discurso en los últimos tiempos y tras afirmar que "España tiene problemas" lanzó un mensaje de optimismo al señalar que la economía española tiene los recursos para salir de la crisis, aunque tiene que ser rápida en ejecutar las reformas puestas en marcha, además de profundizar en algunas de ellas, como la laboral, que definió como "insuficiente".

Pese al ataque al sector de cajas de ahorros, el presidente del BBVA no olvidó referirse a los datos mostrados el viernes por el Banco de España sobre las necesidades de financiación de bancos y cajas, cifradas en más de 15.000 millones de euros, y ello le sirvió para resaltar que "el conjunto de nuestro sistema financiero es solvente" y que las exigencias de capital son manejables.

González destacó que ahora hay que poner en marcha la reestructuración de las cajas, y hacerlo de forma rápida y rigurosa. "Mientras que no tengamos estabilizado de verdad el sistema financiero, no veremos crecimiento sostenible en este país. Necesitamos entidades más solventes y con mecanismos de control adecuados pues solo así, -afirmó el presidente del BBVA-, se puede recuperar la capacidad del sistema para financiar a la economía real".

Con todo, para González el gran problema es que el Estado español no puede seguir sin crecer. "No podemos seguir con 4,7 millones de parados y una tasa de paro juvenil del 43%". En su opinión "España necesita un plan, como el plan que tiene BBVA u otras empresas de éxito".

El presidente del BBVA, que se refirió a la entidad como "el mejor banco universal del mundo" destacando el beneficio obtenido, resaltó las compras que el banco efectuó el año pasado, incidiendo sobre todo en el 24,9% del turco Garanti Bank, que espera cerrar "en las próximas semanas". El presidente insistió en la importancia de estar en los mercados emergentes, ya que el crecimiento de la economía global se apoya cada vez más en estas economías, y menos en las de los países maduros de Occidente.

El Santander Uno de los accionistas que intervino, Blas Corbí, ex trabajador de la entidad vasca, en representación de Uniter, criticó la gestión de González como presidente del BBVA pues bajo su mandato el Santander, según sus datos, ha evolucionado mucho mejor para los accionistas en relación al dividendo, "en bolsa la comparación todavía es más desfavorable". Según Corbí, "en el año 2000, el dividendo por acción del BBV era un 25% superior al del Santander. En 2009 era un 23% inferior". Una inversión de 10.000 euros en 1999 en ambas entidades "nos daría 3.910 euros en dividendos en nuestro banco frente a los 4.436 en el Santander".

En la réplica, González se defendió señalando que la rentabilidad de las cotizaciones siempre debe ajustarse al riesgo, y defendió que el BBVA "tiene su propio estilo" porque "irá siempre a por todas sin jugarse el banco".