"Vendemos donde nos quieren comprar, pero nuestro negocio y compromiso está en Euskadi"
A sus 71 años, Juan José Aurtenetxea, presidente de las empresas del grupo del mismo nombre, no ha perdido vitalidad ni espíritu emprendedor. Empresario a la antigua, 'muere' por su empresa y por su gente, por el valor más caro de su negocio: el capital humano
Bilbao. La implicación en su sector, el desarrollo empresarial, la contribución a la generación de nuevas actividades y puestos de trabajo, la apuesta por la innovación o la aportación personal fueron algunos de los valores que el jurado de los Premios Korta 2010 vieron en el veterano empresario bilbaino Juan José Aurtenetxea para concederle uno de los galardones.
¿Qué significado tiene para usted el premio recibido?
Es un premio muy importante y emotivo porque no se concede por la importancia de la empresa sino por una trayectoria profesional, por toda una vida en el trabajo.
Una vida profesional y activa que por cierto usted ha decidido no abandonar
Empecé a trabajar con 18 años y ahora tengo 71. En teoría me he jubilado y, aunque no hago sino enredar, atiendo al grupo. Vengo todos los días al trabajo, desde las ocho y cuarto hasta la una del mediodía y desde las tres hasta las seis y media, aunque de forma tranquila y con menos responsabilidad porque todos saben más que yo.
El galardón también reconoce su compromiso con el país
Nosotros defendemos nuestro país, que es Euskadi, y es ahí donde nos centramos. Pero no depreciamos nada y vendemos donde nos quieren comprar: Marruecos, Turquía, Israel, Argentina (...) siempre hemos salido fuera hablando de Euskadi y defendiendo este país y su mano de obra, que es la mejor.
Usted ha fundado sus propias empresas. ¿Siempre ha tenido alma de emprendedor?
¡Siempre!, y la conservo, lo que pasa es que ya tengo muchos años.
¿Cuál es el secreto?
Esfuerzo, constancia, dedicación y gusto por lo que se hace. También visión empresarial y capacidad de adaptación a las circunstancias. Siempre hemos apostado por la implantación de las nuevas tecnologías y por la calidad. Fuimos los primeros que conseguimos la certificación ISO 9001 y hoy tenemos tres normas, la tienda virtual, etc., Aurtenetxea ha apostado desde siempre por la modernidad.
¿Aún le quedan retos por afrontar?
Cada día se me ocurre uno. Cada día pienso nuevas cosas.
Usted habrá conocido muchas crisis a lo largo de su dilatada carrera profesional. ¿La actual es peor?
Yo soporté la crisis en la que aquel ministro de Franco, Alberto Ullastres, llevó a cabo un Plan Nacional de Estabilización Económica en 1959, después el Plan de López Rodó, luego llegaron los 70, más tarde la recesión del 92 (...) y las hemos superado, aunque esta, la de ahora, está siendo la peor de todas.
¿Y cómo salimos de este agujero?
Tenemos que tener todos confianza en nuestros Gobiernos para que esto empiece a funcionar, para que la gente empiece a comprar. Hay dinero en los bancos, no se ha gastado, está ahorrado, pero hay miedo. El que iba a adquirir una lonja no lo hace y el que tenía algo ahorrado no se atreve a comprar acciones. Hay que empezar a generar confianza, a menear ese dinero.
¿Cómo le va a su empresa?
Ahora regular, pero seguimos al pie del cañón. En 2009 bajamos en ventas un 17% con relación al año anterior y este año otro 7%, que hay que sumar al 17% que he comentado. El año pasado nos dejamos mucho pero este ejercicio, en el que esperábamos repuntar, es el más duro, y menos mal a que las obras públicas, casos del TAV o la SuperSur, nos están dando mucho juego.
¿Y el futuro inmediato?
Creo sinceramente que en los próximo meses vamos a mejorar, tanto Aurtenetxea como el resto.
¿Se prevé algún "susto" en forma de ajuste de plantilla o similar?
No. Objetivamente podríamos prescindir de cuatro o cinco puestos de trabajo en nuestra empresa y ahorraríamos 35 o 40 millones de pesetas, pero ni nos lo hemos planteado porque entendemos que la coyuntura va a cambiar. En vez de eso hemos acometido una racionalización de gastos generales, consumibles, obras o gremios sin tocar el personal, que es lo más importante para nosotros.
¿Aurtenetxea se ha especializado para sobrevivir?
En realidad nosotros suministramos cualquier cosa que nos pidan, pero somos especialistas en herramienta de calidad y vamos de la mano de los principales fabricantes de herramienta. No trabajamos segundas o terceras marcas.
Otros sectores demandan protección y ayudas oficiales. ¿Ustedes?
También. Es insostenible que nosotros soportemos ventas de 2.000 millones de pesetas y cobremos a 120 o a 200 días.
¿Hay trabajo para todos?
El sector está bien organizado. Antes se creaba una compañía de suministros cada mes y ahora estamos los necesarios. En Bizkaia hay tres o cuatro compañías que atendemos cualquier demanda de construcción e industria.
¿Hemos vivido por encima de nuestras posibilidades?
Por supuesto que sí, tanto a nivel personal como empresarial.
¿Hay que elevar la edad para la jubilación obligatoria?
Un señor cuando llega a los 65 años ya ha trabajado más que suficiente, y aún le quedan muchos años por disfrutar. A los 65 está bien, y mejor a los 60 si se dan las condiciones.
¿Qué opina un empresario como usted de la reforma laboral y de la confrontación patronal-sindicatos?
Es obvio que como empresarios necesitamos flexibilidad y margen de maniobra. ¿Los sindicatos? Si no existieran habría que inventarlos. Yo los respeto porque hay que mantener las reglas del juego, naturalmente, cuando se gana mucho y cuando se gana poco.
Un mensaje final
Los empresarios tenemos que tener esperanza y trabajar bien porque sin el personal, sin el equipo humano, no podríamos hacer nada. En función de cómo tu trates a la gente, la gente te trata a ti.