ablamos desde la incertidumbre, porque todo son casos hipotéticos", analizan desde diferentes puntos de vista de la pelota aficionada. Las medidas de confinamiento trazadas por el Gobierno español para frenar la expansión del coronavirus covid-19 está golpeando en el plexo solar a todos los sectores de la modalidad deportiva. Desde el calendario, cercenado de cuajo, hasta el panorama económico futuro podrían verse afectados por un frenazo sin parangón en la historia.

"El covid-19 está teniendo una influencia muy negativa. Se han tenido que suspender todas las competiciones y desconocemos si se podrán reiniciar todas", desliza Go-tzon Enbil, presidente de la Federación de Euskadi. Se refiere, para empezar, al Grabni. "Valoramos diferentes escenarios: la modificación del calendario en el sistema de competición actual, la modificación del sistema de competición acortando el calendario o la suspensión del mismo", relata. Por su parte, Karmelo Ariznabarreta, máximo mandatario de la Vizcaina, concreta que "hemos tenido que suspender la Bizkaia Cup y no creemos que se pueda terminar, ya que es prácticamente imposible que se cumplan solo dos semanas de cuarentena. El Cuatro y Medio se ha suspendido también y no sabemos qué va a suceder. En junio y julio tenemos las primeras eliminatorias del Baqué, pero son otra incógnita. Nuestra intención es sacar adelante el Interpueblos, ya que se trata de una competición referente y se han celebrado 51 ediciones de manera ininterrumpida". En Bizkaia, además, afecta a la "tecnificación" en todas las modalidades, que está en stand-by.

Desde los organismos rectores no se han lanzado protocolos oficiales de actuación para que los pelotaris puedan seguir ejercitándose en sus domicilios, pero sí ciertas recomendaciones. "Sabemos que muchos pelotaris están cuidando sus manos (en el caso de los manistas) y su preparación física, a pesar de las dificultades que puedan tener dado el poco espacio que tiene la mayoría en sus domicilios", recita Enbil, mientras que Ariznabarreta desbroza que "lo más importante es la salud y hacer caso a las autoridades". En el caso de la pelota a mano, dada la particularidad de la especialidad, en la que es necesario el contacto diario con la pelota en frontón, cuestión totalmente prohibida, existen dudas. "Hay que tener en cuenta que pueden pasar tiempo sin tocar pelota y es un hándicap para las manos, que tienen que hacerse. Lo ideal sería que iniciaran la actividad un par de semanas después de retomar los ensayos para evitar lesiones", manifiesta el federativo de Galdakao.

En cuanto a la posible pérdida de patrocinios, desde la Federación de Euskadi advierten que "de momento no tenemos constancia de ello y esperamos que esta situación no repercuta negativamente en este aspecto tanto en las federaciones como a los clubes". "No hemos tenido ninguna influencia económica negativa, pero si esta situación se prolonga en el tiempo, quizás podamos tener alguna", remachan.

Por otro lado, el torneo más antiguo del campo aficionado vizcaino, el de Mungia, fue uno de los primeros en avisar del cierre de la actividad. El plan inicial era terminarlo el 17 de mayo, fecha imposible. "Si empezamos a primeros de mayo, podríamos encajar la final en Sanpedros", destacan desde el club Danak Bat. El calendario es un puzle por montar. "Para llegar a semifinales nos quedan muchos partidos. Podíamos valorar otros formatos, pero seguiría siendo complicado, ya que entrarían en juego más competiciones. Además, tenemos pendiente el Hiru Errege, que empezaría a finales de abril", apostillan desde el club mungiarra, desde donde son conscientes de que es posible que haya torneos que queden desiertos.

Como medida para mantener el tono, a los pelotaris mungiarras que estaban integrados en la selección de Bizkaia del Grabni, por si acaso, se les puso "una tabla física". "Con los manistas habrá un problema, porque no todos tienen espacio para calentar las manos", añaden. Lo ideal sería "no sobrecargarlos" por la llegada de posibles lesiones. Asimismo, los patrocinadores del Torneo de Mungia "están entendiendo" la singularidad de la situación.

Algo similar sucede con el Torneo Nacional de Clubes de Euskal Herria, que cuenta con la colaboración de DEIA. Iñaki Pérez de Eulate, uno de los responsables de la competición -que se encuentra a falta de una semifinal entre Lemoa y Buruzgain y la final-, es tajante: "La sexta edición tendrá campeón y subcampeón". Se podría alargar hasta el 20 o 27 de junio. "Observamos que más allá hay saturación en el calendario veraniego, pero todo depende de cómo se desarrollen los acontecimientos de aquí en adelante. Con todo, nos gustaría que los pelotaris contaran con tiempo para adaptarse de nuevo al ritmo y a la dureza del juego", argumenta Pérez de Eulate, quien reconoce que todas las empresas que suponen un soporte para el Nacional de Clubes continuarán manteniendo "su apoyo".