VIRGINIA Pérez acostumbra a vivir su trayectoria de reto en reto. Sin prisas, pero sin ponerse límites tampoco. Una manera de afrontar el deporte que encuentra en la montaña. La atleta del BM Bilbao Atletismo comenzó ganando pruebas en tierras vascas y se convirtió en poco tiempo en una de las referencias del trail. Sin embargo, quería dar otro más. Siempre inconformista. Y para mejorar sus prestaciones se mudó desde Bizkaia al Pirineo Aragonés para tener a su alcance lugares de entrenamiento más exigentes. Entonces apareció un enemigo inesperado: la nieve. Los entrenamientos de invierno se convirtieron en una lucha contra las adversidades y ante esta situación Pérez no tiró la toalla sino que se adaptó a su nueva situación. Utilizó el snowrunning como complemento para su deporte y el éxito no tardó en llegar. A principios de febrero consiguió el Campeonato del Mundo de Skysnow en carrera clásica y fue tercera en el Campeonato del Mundo de carrera vertical en las pruebas disputadas en Sierra Nevada.

Estos dos grandes resultados llegaron en un fin de semana frenético. Pérez disputó la modalidad vertical, una carrera de cuatro kilómetros y medio con casi mil metros de desnivel positivo, el viernes a primera hora. Al día siguiente ya estaba compitiendo de nuevo en la prueba clásica, doce kilómetros y medio con también cerca de mil metros de desnivel positivo. Dos esfuerzos titánicos en poco tiempo que supo gestionar a la perfección. “Te hace tener muy en cuenta la recuperación. El acabar una y ya estar mentalizándote para la siguiente. Después del kilómetro vertical estuve haciendo bici y a la tarde y la mañana del día siguiente salí a rodar y hacer unas rectas. Buena siesta y buena alimentación, primordiales para rendir al máximo”, explica la atleta del BM Bilbao Atletismo. El tercer puesto logrado el viernes ya le lleno de felicidad, pero fue con su victoria del sábado cuando las lágrimas de felicidad aparecieron: “Para mí es un sueño hecho realidad. Es la primera vez que consigo un título a nivel mundial y me hizo especial ilusión”.

El buen rendimiento en las carreras con nieve llegó en muy poco tiempo para Pérez. Su primera carrera fue en 2021 y se apuntó a ella para sumar kilómetros de competición tras un 2020 marcado por las suspensiones. Un año más tarde de su estreno se convirtió en campeona del mundo. “Al vivir en Pirineos, durante el invierno no puedo hacer entrenos largos por el monte y no puedo luchar contra la nieve, así que mejor unirme a ella y aprovechar este tipo de disciplinas para compaginar con mi deporte”, afirma. Así, lo que comenzó como un complemento se convirtió en una nueva modalidad de la que disfrutar. “Me gusta la sensación de bajar muy muy deprisa y notar debajo de los pies la nieve. También es bonito disfrutar de los paisajes nevados”, añade la corredora, aunque tampoco es todo sencillo: “Se debe correr por pistas de esquí, que no se pueden utilizar cuando las estaciones están abiertas, por lo que hay muy pocas posibilidades”.

cita con el trail

Aunque los éxitos logrados en la nieve, no distraen a Pérez de su otro objetivos. La primavera llega, el buen tiempo aparece y es el momento de centrarse en el trail. “Tengo por delante una temporada muy ilusionante con varios campeonatos de España de kilómetro vertical y diferentes carreras. También tengo la Copa del Mundo y ojalá pueda conseguir una plaza para el Mundial de Trail en Tailandia”, declara. Entre esos objetivos está el Campeonato de España de Trail que se disputa a principios de abril. Ahí, competirá con el BM Bilbao Atletismo y luchará por sumar el doblete venciendo en individual y en clubes. Otro reto más para sumar a su larga lista.

Las condiciones climatológicas de su lugar de residencia, los Pirineos, le hicieron comenzar a practicar el snowrunning