La crisis sanitaria ha provocado que el Zubileta Evolution Zuazo tenga que apretarse el cinturón y, como consecuencia, este verano el club barakaldarra tan solo ha efectuado un fichaje: el de Isi Fernández-Agustí (Oviedo, 2001). A pesar de tener varias ofertas sobre la mesa, la extremo asturiana, procedente del Elche, se decantó por el Zuazo para volver a jugar junto a su hermana Mada, rojinegra desde la temporada pasada. De esta forma, en este atípico curso, Lasesarre será el escenario del reencuentro de dos hermanas que volverán a unir sus caminos tras tres años separadas.

¿Qué tal sus primeros días por Barakaldo?

—Muy bien, estoy muy contenta. Estoy intentando afianzar mi relación con todas las jugadoras, pero de momento muy bien, todos me están tratando genial, siempre están pendientes de mí y eso la verdad es que se agradece.

Tuvo otras ofertas en la Liga Guerreras Iberdrola. ¿Por qué se decantó por el Zuazo?

—El Zuazo es un equipo que tiene una propuesta de juego muy dinámica y me gusta mucho ese estilo que tiene. Las jugadoras muestran confianza y no solo por el entrenador, que la transmite, sino por lo que se ve también fuera de la pista. Aquí hay un ambiente muy bueno y eso me tiró mucho a la hora de escoger equipo. Además, un punto fundamental es que aquí está mi hermana Mada y, después de tres años separadas, me hace muchísima ilusión volver a jugar con ella. Será especial.

¿Cómo es eso de jugar en la élite con una hermana?

—Por supuesto que Mada me dará más caña que al resto de compañeras, siempre me va a exigir más de lo que yo misma me exijo, pero también es verdad que ella siempre va a estar ahí, sobre todo en los malos momentos. Es entonces cuando será la primera que esté, sé que voy a poder contarle todo porque siempre me va a apoyar.

¿Qué le dijo cuándo le llegó la oferta del Zuazo?

—Que ni me lo pensara, que aquí en Barakaldo iba a estar muy bien. Que el equipo es muy guay y que no me preocupara porque iba a estar con ella. Al final, yo no soy tan independiente como puede ser ella, necesito a mi gente cerca, así que el hecho de que ella estuviera aquí fue muy importante para tomar la decisión de firmar por el Zuazo.

Este será su segundo año como senior después de que el curso pasado militara en el Elche. ¿Cómo se ve como jugadora?

—Ahora mismo no estoy en mi mejor forma, pero sí que estoy segura de que voy a llegar a ese pico este año. Estoy muy motivada para trabajar y enseñar a todo el mundo la mejor versión de mí y de mi juego. Ese es el objetivo que tengo para esta temporada. Al final, el año pasado en el Elche no conseguí todos los objetivos que tenía en mente pero fue un año en el que aprendí muchas cosas, cosas que espero poder utilizar con el Zuazo para llegar a lo que quiero.

Será una liga atípica, con dos grupos y dos fases. ¿A qué cree que puede aspirar el Zuazo?

—Creo que tenemos las mismas oportunidades y las mismas posibilidades que el resto de equipos de la liga. El Zuazo es un equipo joven y sí es cierto que hay otros con mucha más experiencia, pero esta liga es nueva para todos. Será una liga complicada, una liga donde habrá que afianzar mucho nuestra forma de jugar para poder pasar de fase entre las cuatro primeras. Ese es el objetivo del Zuazo, pasar dentro de los cuatro primeros clasificados, lo que venga luego será ya otra historia.

El curso pasado el Zuazo lo pasó mal al comienzo de temporada, no terminó de carburar. ¿Cómo lo vio usted desde fuera?

—Lo hablé mucho con mi hermana porque no entendía por qué perdían tantos partidos de uno. Siempre acababan perdiendo partidos muy igualados. De hecho, el año pasado jugué contra ellas y el Elche también acabó ganando de uno. En muchos partidos les pasó lo mismo y no entendía por qué, porque veía al Zuazo muy bien, no entendía por qué les faltaba ese plus de saber sacar los partidos adelante en los últimos minutos. También tenía claro que acabarían sacándolos con el paso del tiempo. Llegó la crisis sanitaria, pero tenía claro que se iban a librar del descenso.

El sábado tienen un nuevo amistoso, en este caso ante el Bera Bera. Un plato fuerte...

—Pues sí, muy fuerte, un poquito más de la cuenta. No me esperaba un partido ante un rival así de primeras, pero aquí no tenemos miedo a nada, iremos a Donostia con todo y a por todas, y que sea lo que tenga que ser.

"El Zuazo es un equipo con una propuesta de juego muy dinámica, con confianza y que tiene muy buen ambiente"

"Mi hermana Mada me dará mucha caña, pero también será la primera que estará ahí en los momentos malos"