Bizkaia Big Band da un paso más en su despegue con Olejniczak como invitado
La recién creada orquesta ofrecerá un concierto mañana en Barakaldo con la colaboración del saxofonista polaco
Si alguien se imagina a una orquesta compuesta por más de 20 instrumentos, pero que, en lugar de tocar clásica, tocan jazz o swing, entonces ya sabe lo que es una big band. Tras la expansión de la música de jazz procedente de Nueva Orleans, este tipo de formación, comenzó a ser frecuente durante los felices años 20, llegando a su máximo esplendor durante las siguientes décadas de los años 30 y 50.
En la actualidad, puede que una big band (literalmente, en inglés gran banda) no sea tan popular como otros tipos de bandas, como las de pop o las de rock y metal, pero están más vivas que nunca. En Bizkaia acaba de surgir una de estas formaciones, compuesta por músicos que están rodados en los escenarios vascos y estatales en su mayoría y que con su nombre, Bizkaia Big Band, ya planea llevar el nombre de nuestro territorio fuera de nuestras fronteras. “Tenemos una corta andadura pero grandes aspiraciones, que vamos a poder cumplirlas con la gran experiencia, veteranía e ilusión de nuestros músicos. Varios de sus componentes tienen sus propias formaciones en formato de quinteto o cuartetos además de trabajar como freelances, como por ejemplo el saxofonista Andoni Aizpuru, la cantante Carla Sevilla, el bajista Santiago Gorostiza o la pianista Amaia Izarzugaza, por citar unos cuantos”, explica Bixente Molina Lonigan, trombón de la orquesta.
La Bizkaia Big Band está dirigida por Óscar García y compuesta por una mezcla de intérpretes de formación clásica con otros de formación moderna. Son exalumnos de conservatorios, personas aficionadas, semiprofesionales y profesionales interesadas en este proyecto. En su repertorio no faltan los temas clásicos de swing de Duke Ellington o Count Basie, como tampoco otros estilos más modernos como el funky, rock... Tampoco f las baladas ni la música latina, abarcando desde alguna guaracha hasta las bossas o sambas. “Un repertorio pensado para ser lo más variado y divertido para todos los públicos”, aseguran desde la orquesta.
concierto
La formación musical ha debutado este mismo mes en Barakaldo y mañana, sábado, a partir de las 19.30 horas en la Casa de Cultura Clara Campoamor de Barakaldo, ofrecerá otro concierto muy especial, ya que a la fuerza de sus instrumentos se unirá la colaboración del polaco Andrzej Olejniczak, uno de los saxofonistas europeos con más reconocimiento y prestigio internacional. Compositor, arreglista y pedagogo, ha grabado unos 70 discos y ha tocado en los festivales de jazz más importantes del mundo: el Festival de Jazz de Montreal, de Quito, de Donostia, de Varsovia, de Frankfurt, de San Remo, de Kuwait... Y como solista, con la Orquesta Sinfónica de Bilbao, la de Olsztyn, la Orquesta de La Radio Polaca de Varsovia...
Desde 1984 vive en Bilbao, donde trabajó con el pianista de jazz Tete Montoliú actuando con él en los escenarios europeos. “Es un honor tocar con él. Además, tendremos el honor de estrenar con nuestra Big band El juguete, uno de los temas que compuso y grabó en 2012 en formato más reducido, pero esta vez con arreglos para Big band que ha realizado nuestro director”, señalan desde la orquesta. En estos momentos, están también en conversaciones para participar, de alguna manera, con el Athletic Club en la conmemoración el año que viene del 125 aniversario del Club.
“Al jazz siempre se le pone la etiqueta de música difícil, pero es muy amplio, tiene corrientes muy diferentes. El que se hace en una Big band es una gozada, tiene mucho swing, el público se lo pasa muy bien. Está muy bien que haya combos de trikitixas, de txalapartas, orquestas clásicas... pero hay más tipos de música. Orquestas como la nuestra tienen dificultades para salir adelante, necesitamos más ayudas. Nuestro proyecto, que no tiene una meta económica, es llevar el jazz a toda Bizkaia, pero si queremos un nivel de calidad, tenemos que afrontar una serie de gastos para lo que necesitamos apoyo económico. No somos unos amigos que nos juntamos, hay mucho trabajo y profesionalidad detrás”, explica Bixente Molina.