Los chicos del coro, el musical desembarca en Bilbao tras el éxito cosechado en Madrid donde más de 115.000 espectadores han disfrutado de este espectáculo “que te llega más allá del corazón, te abre el alma y los sentimientos”. Su director, Juan Luis Iborra, y la actriz Natalia Millán, junto a una representación de los niños y niñas protagonistas de la obra basada en la película francesa Les Choristes (2004), han comparecido hoy en rueda de prensa y han ofrecido un pequeño adelanto de este musical, que se estrenará este jueves y ocupará la cartelera del Teatro Arriaga hasta el próximo 10 de septiembre.

“Es un espectáculo que emociona y es muy divertido”, han descrito los niños, poco antes de entonar una de las canciones que se podrán escuchar en las funciones del Arriaga. Después de haberse alzado con cuatro galardones en la XV edición de los Premios del Teatro Musical, esta obra viene dispuesta a arrancar varias lágrimas al público gracias a su enternecedora historia. El musical se ha metido en el corazón de quien lo ha presenciado, con la magia de un coro infantil y una historia emotiva que ha robado el corazón de pequeños y adultos.

'Los chicos del coro' llegan al Arriaga

'Los chicos del coro' llegan al Arriaga Teatro Arriaga

Además de los 70 niños y niñas que conforman la coral de la Escuela Los Chicos del Coro – en Bilbao estarán 15– y que llevan preparándose desde el mes de febrero para el espectáculo, el musical cuenta con un reparto de lujo bajo las órdenes de Juan Luis Iborra. Como protagonista, dando vida al icónico profesor Mathieu, estará Manu Rodríguez. En Madrid, interpretó este papel Jesús Castejón, pero “no ha podido venir a Bilbao porque le han tenido que operar. Pero Manu Rodríguez está maravilloso en este rol”, ha explicado Iborra. En escena le acompaña Natalia Millán, una de las grandes intérpretes de musicales de la escena estatal, poniéndose en la piel de Violette Morhange. Además, Rafa Castejón interpreta a Rachin, el férreo director del internado del Fondo del Estanque.

 “Es un lujo poder contar con las voces y las interpretaciones de los niños que forman parte de este internado y del resto de actores que dan vida a los diferentes personajes de este montaje que se sitúa en la Francia de 1949”, en opinión del director de esta obra. 

Audiciones

Para conformar el elenco infantil, se convocaron audiciones abiertas con el objetivo de encontrar a niñas y niños no profesionales; de esta forma, los jóvenes intérpretes podrían trabajar desde cero, modelar sus voces y adquirir el color de la coral de Saint Marc en Lyon, que pone música a la película. Para conseguirlo, se contó con Toni Arenas y Nicolás Martín Vizcaíno, quienes llevaron durante años la gira de esta coral francesa. Además, trabajaron con tres directores de coro y un profesor de técnica vocal y solfeo para que los alumnos y alumnas estuvieran formados de la misma manera que el coro francés. 

Sensibilidad femenina

Siendo absolutamente fiel a la película, aporta un extra de sensibilidad femenina por la inclusión de la profesora de Matemáticas y sus alumnas. “Hemos introducido en el argumento un pequeño cambio para que también haya presencia femenina. Las alumnas de un internado que se incendia tienen que trasladarse a En El Fondo del Estanque, un centro para niños problemáticos. Ha sido el mayor acierto del espectáculo. Su inclusión ha hecho que todo empaste mejor”, asegura Iborra.

Los chicos del coro es una historia de superación a través de la música ”, ha descrito Natalia Millán quien interpreta a Violette Morhange, la madre de Pierre, uno de los alumnos del internado. La actriz ha reconocido que desde su estreno en Madrid este montaje sólo les ha dado alegrías, que logra provocar en el espectador risas y lágrimas y que es una historia “muy honesta y sincera”.

En Los chicos del coro hay tres temas: la infancia, la música y la enseñanza. La historia transcurre en un internado/correccional, en 1949, tras la guerra mundial, en una Francia llena de conflictos sociales y de pobreza, en que muchos niños eran huérfanos de guerra, y otros de familias de precaria economía. Clément Mathieu , un profesor de música en paro, recibe una oferta de trabajo como vigilante en un internado para chicos problemáticos. En El Fondo del Estanque va a conocer a unos chicos que le van a dar el aliciente para volver a su gran pasión: la música. Pone en marcha una coral para, a través de la música, sacar lo mejor de cada chico. 

Frente a los métodos dictatoriales del director del centro, Rachin, al cabo del tiempo, los alumnos llegarán a formar un exitoso coro. La fuerza creativa de la música llega al corazón de todos y abre las puertas al compañerismo, la solidaridad y el amor. El teatro Arriaga de Bilbao ofrecerá 25 funciones hasta el 10 de septiembre.