El sector vio cumplida ayer martes una de sus reclamaciones históricas, contar con una prestación especial por desempleo para sus trabajadores así como poder hacer compatible al 100% la pensión de jubilación con la actividad artística. El Gobierno aprobó el Real Decreto que promueve una contratación “más estable” del sector cultural, un texto que despliega una prestación específica para los trabajadores de la cultura, quienes a pesar de su “intermitencia” tendrán una mayor protección social, según anunció ayer la segunda vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz. Díaz explicó que se trata de una norma que contiene una cotización “muy dúctil” y “flexible” y responde a una de las grandes reivindicaciones del sector. “Es un día muy importante porque se aprueba una protección social que muy pocos países tienen y es una de las medidas que más han luchado los trabajadores de la cultura”.

La medida cambia el régimen ordinario de protección social, y según Yolanda Díaz, los beneficiarios podrán acceder a un sistema de cotización “dúctil” al acreditar 60 días cotizados por prestación real de servicios en la actividad artística en los últimos 18 meses por un total de 120 días o elegir el sistema de desempleo que minora las necesidades de cotizaciones a 180 días en un plazo de seis años anteriores a la situación legal de desempleo siempre que no hayan sido tenidas en cuenta para el reconocimiento de una prestación previamente.

La duración de la prestación es de cuatro meses y está dotada con una cuantía de hasta el 100% del IPREM para las cotizaciones que superen el umbral de 61 euros. Por debajo de ese nivel corresponderá una prestación del 80 por ciento del IPREM.

La noticia fue recibida con alegría por el sector cultural en general. La secretaria general de Unión de Actores y Actrices, Silvia de Pé, dijo que era “un día histórico”. “Es una noticia y una medida positivísima. Estoy muy emocionada porque hemos luchado desde hace diez años por esto, y tras una negociación larga e intensa ha salido adelante”, comentó.

La medida, según Silvia de Pé, es adecuada porque responde “a la naturaleza de la profesión” y ha señalado que “la intermitencia” es una característica que “pertenece a los artistas”. “Teníamos que tener una prestación adecuada”, afirmó.

Por otro lado, el presidente de la Asociación Colegial de Escritores (ACE), Manuel Rico, calificó de “paso muy importante”. “Es un paso muy importante pero no es todo, son algunos aspectos reclamados desde el principio y, en este sentido, sí es un avance”, ha reivindicado en declaraciones a Europa Press el autor, resaltando por ejemplo que desconocen si entrarán dentro de la compatibilidad entre pensión y derechos de autor la figura de la ‘incapacidad permanente’.

“Vamos a esperar a ver si entran dentro de las no contributivas las pensiones por incapacidad permanente. Hay que garantizar la pensión para aquellas personas que pueden seguir escribiendo a pesar de haber recibido la incapacidad absoluta en su trabajo”, matizó.

Entre los avances aprobados, Rico destacó que en la citada compatibilidad entre derechos de autor y pensiones se añadan los ingresos por “actividades conexas” a escritores –conocidas en el sector como bolos– tales como participaciones en jurados o en conferencias, entre otras.

Las SGAE cree que facilitará el crecimiento del sector

El presidente de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE), Antonio Onetti, afirmó ayer que el Real Decreto aprobado por el Gobierno para la prestación por desempleo adaptada a “la intermitencia” del sector cultural facilitará un crecimiento “a medio plazo” y “ayudará a la recuperación”.

“Creemos que estas medidas pueden ayudar a que la recuperación sea más rápida y que también facilite un crecimiento del sector a medio plazo, ayudando al desarrollo de vidas profesionales dignas que permitan que el enorme talento autoral, artístico y profesional no se desaproveche”, explicó Onetti en declaraciones a Europa Press.

Así, desde la SGAE valoran “positivamente” las medidas aprobadas por el Consejo de Ministros en el marco del Estatuto del Artista, asegurando que “por fin se reconocen, entre otras, las circunstancias específicas de los trabajadores” que desempeñan su actividad en el sector cultural. “La cultura y las artes, que según los últimos datos disponibles emplean a más de 710.000 personas y suponen más del 3% del PIB, poseen unas características que les diferencian de otros sectores económicos”, defendió Onetti.