El consejero de Cultura, Bingen Zupiria, lo dejó ayer bien claro: “Durante el verano hay que generar el máximo de actividad cultural posible, aunque se hayan suspendido las fiestas de los pueblos y ciudades. Una actividad que permita que se reabran los espacios de trabajo, que se generen ingresos económicos para poder vivir y también para recuperar el contacto en vivo con el público quien, en definitiva, es el que tiene que disfrutarla”.
Zupiria hizo estas declaraciones precisamente en una rueda de prensa en la que se anunció el estreno de Txango bat, una travesía audiovisual por la colección de la pinacoteca de la mano de la compañía vasca Kukai Dantza y que sirve de prólogo a la reapertura del Bellas Artes de Bilbao el próximo 1 de junio. “La visita al Bellas Artes va a ser segura, natural y placentera”, prometió a su vez Miguel Zugaza, durante la presentación, a la que también asistieron la directora de Obra Social de BBK, Nora Sarasola, y el coreógrafo y bailarín Jon Maya.
Txango bat es una creación original coproducida por el museo y BBKTxango bat durante la crisis sanitaria, una excursión al corazón del Bellas Artes, que busca invitar al nuevo visitante a recorrerlo “como si fuera el único espectador del museo”. Maya y el equipo de Kukai Dantza recorren las 31 salas de la pinacoteca reinterpretando mediante la danza, la música y el canto, el viaje conceptual propuesto por Kirmen Uribe en la exposición ABC a partir de las obras pertenecientes a los fondos propios de la pinacoteca. El montaje escénico se estrenó ayer a las 20.00 horas en el canal de YouTube de la web de la pinacoteca bilbaina.
Su autor, Jon Maya, salió de su confinamiento y se adentró con sus compañeros en el museo para rodar esta creación audiovisual, testimonio del confinamiento del arte, “donde los cuerpos, la voz y la música ocupan el espacio de la ausencia de los visitantes, al mismo tiempo que invitan a ocupar de nuevo el particular lugar que nos corresponde a cada uno de nosotros delante del arte”. Maya insistió también en la importancia del papel de los artistas y los museos “en unos momentos tan duros como los que hemos vivido de confinamiento”.
Según explicó Zugaza, el lunes el museo reabrirá con entradas reducidas al 50%e tomará la temperatura a todas las personas que accedan a su interior.
Para evitar el contacto entre los visitantes y garantizar la distancia de seguridad personal de dos metros, se han habilitado entradas y salidas diferenciadas y se ha diseñado un itinerario para el visitante con el que se intentará evitar los cruces de gente. Zugaza anunció también que el museo va a llevar a cabo una campaña de captación de pequeñas donaciones, a través de la plataforma para móviles Bizum y de forma presencial, entre los visitantes, para que quien quiera pueda hacer la aportación que desee.
A pesar del cierre durante los “momentos más duros” de la crisis sanitaria, BBK y el Museo de Bellas Artes de Bilbao no han interrumpido su colaboración. Entre las próximas iniciativas se encuentra a partir del 15 de junio BBK Artearen Ibilbidea, una exposición itinerante al aire libre que propone un recorrido por las colecciones del museo a través de cuarenta reproducciones. Dará comienzo en la Plaza Nueva de Bilbao y, durante todo este verano, llevará al Museo de Bellas Artes, de la mano de BBK, a distintos localidades de la costa de Bizkaia.
Durante su intervención, Bingen Zupiria apuntó también que “un museo es, seguramente, uno de los lugares más seguros donde podemos pasar las próximas fases de la desescalada”.
Sin embargo, no solo abren los museos en junio. “Nuestro deseo es que los teatros puedan recuperar su actividad a partir del 8 de junio, con un aforo cercano al 50% y con todas las medidas higiénico-sanitarias que se deben cumplir”, adelantó el consejero. Un aforo del 50% que se mantendrá tanto en museos como en teatros a pesar del avance en las fases de la desescalada de Euskadi durante este verano.
Zupiria también señaló que esta previsión figura en “nuestros documentos de trabajo y en los planteamientos que estamos haciendo al Gobierno de España en la negociación de las diferentes fases de desescalada”. “Estamos obligados a volver a la normalidad pero no sabemos cómo se van a desarrollar los próximos meses”, reconoció. “Nadie tiene ninguna certidumbre sobre la evolución que va a tener la enfermedad, por lo que tenemos que ponernos en la tesitura de que igual hay que convivir con ella durante meses y esos meses tienen que ser de vida normal, que nos va a exigir adoptar una serie de medidas muy básicas. Por ello, tenemos que conseguir que todos los espacios públicos donde se puedan desarrollar alguna actividad cultural cumplan las instrucciones de seguridad e higiene sanitaria”. “Es posible hacerlo y nos tenemos que poner a ello con el ánimo de recuperar la actividad y la normalidad”, concluyó.
