CASA Leotta ha traído a Bilbao desde Calabria una cultura gastronómica que deleita al paladar con sus especialidades, como la pinsa, que elaboran con una masa a base de tres tipos de harina (de trigo, soja y arroz). Tras fermetar durante 72 horas, consiguen un resultado más ligero y saludable.
Con este concepto de elaboración que existe en la Universidad de la Pizza, huyendo de la idea de comida rápida, Casa Leotta obtiene lo que sus responsables denominan Pizza 2.0. A darle un carácter a su pinsa contribuyen ingredientes muy artesanos y de calidad, como la nduja, una sobrasada picante.
Como entrantes, es una delicia la porquetta (lomo de cerdo asado a baja temperatura con finas hierbas y especias) o la parmigiana de berenjena, con capas de berenjena, tomates, queso Provolone y Parmesano.
Esta pizzería que busca ser diferente inspirándose en Sicilia y Calabria, y con la pinsa como buque insignia, en 10/15 variedades, apela a la tradición incluso en el propio local, que evoca a la típica casa de comidas siciliana, tipo tasca, acogedora y con alma moderna en los detalles, donde dan acomodo a 30 comensales en sus ocho mesas, tanto en comidas como en cenas, de martes a domingo. Como detalle, sus mantelitos incluyen explicaciones para conocerlo todo sobre la pinsa y sus ingredientes.
Para regar esa pasión por la pizza italiana en versión calabresa, el negocio cuenta con una selección de cervezas artesanas y una extensa carta de vinos que incluye caldos italianos, de Sicilia (4 o 5 tintos) y también de Rioja, Toro, Godello y otras D. O. Todos armonizan bien con los platos de una carta “viva”, que varía según los productos de temporada y que potencia los postres y helados artesanales de Calabria.
Tras tres meses de éxito, actualmente trabajan en aplicaciones digitales para llevar la comida a domicilio, como Deliveroo, Glovo y Just Eat.