BILBAO - Malavaje acerca hoy a la sala Satélite T su disco 30 años de tangos, en el que agrupan temas propios y clásicos como Tango amigo, Chinchorro, Garufa o Cambalache. Todos sonarán en Bilbao, en formato de trío. Su líder y cantante, Antonio Bartrina, sostiene que “el tango cuenta la vida, por eso atrapa”. “Mucha gente se acercó a él escuchándonos”, explica a DEIA.
“A veces se ha alargado el tiempo entre disco y disco, pero siempre hemos estado activos con los conciertos”, dice Bartrina, que impulsó Malevaje en los 80 con el refuerzo de miembros de Gabinete Caligari, en los tiempos de la Movida. “La supervivencia no tiene secretos, tiene que ver con el trabajo. Hacemos algo que nos apasiona y que sigue gustando a la gente”, apostilla.
En Tango amigo, canción de Bartrina con música de Osvaldo Larrea, se sugería que la vida es un tango. “No sé si lo es, pero los tangos te cuentan la vida y, por eso, posiblemente, ésta música te atrapa completamente”, razona el de Malasaña, que llega a Bilbao con su nuevo álbum, grabado en directo en Madrid hace casi tres años y editado recientemente tras dos de gira. “No se podía demorar más”, indica.
Malevaje llega en formato de trío, con Bartrina a la voz, Fernando Gilabert al bajo y Sacri Delfino a la guitarra. “Nuestra formación es variable, y depende del lugar en el que toquemos. Nos hemos tenido que adaptar a la situación, como casi todo el mundo”, explica, para adelantar que en la presentación en Madrid sumarán bandoneón, bailarinas e invitados. Sobre el bolo en Bilbao, asegura que le encanta tocar en locales pequeños con el público al lado: “Es una manera de no perder el suelo bajo los pies”, explica.
Bartrina, que ve necesaria “una chulería justa y bien situada” para cantar tangos, alternará hoy clásicos y temas propios. El cantante niega tener un tango favorito (“cada uno tiene su momento, como la música en general: sea tango, rock o zarzuela”), aunque destaca, de entre múltiples versos “contundentes y maravillosos” de este género, los de la última curda: “... la vida es una herida absurda y es todo tan fugaz que es una curda nada más mi confesión”.
Gardel y la juventud “Carlos Gardel inventó el tango cantado, que antes de él era instrumental, y todos los caminos conducen a él”, explica Bartrina, que también destaca la contribución musical al género de Goyenechea, Rivero o Sosa, así como la de Discépolo como “gran poeta, muy crudo y con una ironía triste”, seguido por Castillo, Flores, Expósito, Manzi...
“Yo no me puedo comparar con Gardel, pero mucha gente joven se acercó al tango en España escuchando a Malevaje”, se enorgullece Bartrina. “Y esa gente que en los 80 era joven como nosotros, ahora inculcan el veneno del tango a sus hijos. A veces, en los conciertos, tenemos tres generaciones de la misma familia, y para mí eso es algo grande”, concluye. -Andrés Portero