SI te apetece un plan diferente y te gusta vivir nuevas experiencias, ahora tienes a tu alcance la posibilidad de sentirte minero por un día. Solo es preciso reunir un grupo de amigos o familiares, niños incluidos, para sumergirse en el pasado industrial y metalúrgico de Euskadi, anclado al hierro. A partir de ahí, habrá que ponerse el casco, adentrarse en las minas, coger el pico y a extraer el propio material disfrutando de una aventura inolvidable en las entrañas de la tierra. El esfuerzo se verá después recompensado en la mesa, como colofón al esfuerzo subterráneo.
La aventura tiene lugar en la localidad guipuzcoana de Zerain y comienza con una visita guiada al Centro de Interpretación Aizpitta, esencial para conocer el pasado minero de la zona, seguida por un paseo por la montaña del hierro hasta las minas de Aizpea que albergan en su interior y que han obtenido la denominación de Conjunto Monumental del Departamento de Cultura del Gobierno vasco, en pleno Parque Natural de Aizkorri-Aratz.
Tras las explicaciones, una vez inmersos en el medio natural y en las tradiciones, llega el momento de buscar mineral en las galerías. Luego, un taller de transformación del mineral mostrará las posibilidades del mismo. Para finalizar la experiencia, “del gusto tanto de mayores como de los más pequeños” según Euskadi Reception, la empresa comercializadora de la misma, una alubiada tradicional siguiendo la receta minera en una sidrería de la zona en la que compartir vivencias e impresiones, pondrá el punto final más sabroso a esta singular expedición al pasado.
Con todo, esta posibilidad de relacionarse con la minería que ofrece Basquetour, desde las entrañas de la mina, tiene una duración de siete horas y está pensada para grupos de ocho personas como mínimo. El precio por adulto es de 50 euros, que se rebaja a 20 para niños y en el caso de grupos grandes, como sucede con algunas asociaciones, se suelen llegar a acuerdos con el proveedor para modificar el precio, sin incluir la comida, por ejemplo, detallan desde Euskadi Reception al tiempo que subrayan que “es importante reservar la experiencia con antelación, con 48 horas como mínimo, para confirmar la disponibilidad”.
Además, la escapada a Zerain -a poco más de una hora por la AP-8-, puede aprovecharse para conocer este pequeño pueblo que conserva el encanto del ambiente rural tradicional. Situado en la comarca de Goierri, en las estribaciones del macizo de Aizkorri, añade a sus atributos naturales un patrimonio y un legado cultural de primer orden.