MADRID - Fernando del Paso, galardonado ayer con el Premio Cervantes, es un creador nato, un corredor de fondo de la literatura, que a sus 80 años ha transitado por todos los géneros: teatro, cuento, poesía y ensayo, además de ser un gran pintor y dibujante. En resumen, un estilista y un innovador de la lengua española. Un artista que no está “de paso” por la vida, porque, además de todo lo reseñado es miembro de la Academia Mexicana de la Lengua y del Colegio Nacional de México, ha colaborado en algunas de las revistas y suplementos culturales más importantes de su país y ha expuesto su obra en México, Francia, Reino Unido y EE.UU.
La pasión de un hombre que desafió su destino, tocado por muchas enfermedades, gracias a su amor por las letras, como él ha reconocido en varias ocasiones, ya que a lo largo de su vida ha sufrido varios infartos cerebrales y tres cánceres distintos.
A pesar de ello, este creador nacido en Ciudad de México en 1935 asegura que “la verdadera lucha la libran los mexicanos que viven en extrema pobreza y el verdadero valor es el de los padres que buscan a los desaparecidos”. Su vida gira en torno a la literatura. “El patrimonio más rico del mundo: las letras de imprenta con las que se fundan y destruyen imperios y famas”, escribía el autor.
Su gran obra, Noticias del Imperio (1978), junto con José Trigo (1966) y Palinuro de México (1977) abunda y explora los episodios “más singulares y bellos” de su país, todo ello envuelto en una estética rica e innovadora.
A Fernando del Paso, al que le duele su patria, como recordó cuando recogió el Premio José Emilio Pacheco, le caracteriza su enorme dimensión ética y el amor por la historia y por el juego de las palabras. “Me duele hasta el alma que nuestra patria se desmorone”, precisó Del Paso en su discurso: “Quiero decirte lo que tú ya sabes (en referencia al poeta mexicano José Emilio Pacheco): que hoy también me duele hasta el alma que nuestra patria chica, nuestra patria suave, parece desmoronarse y volver a ser la patria mitotera, la patria revoltosa y salvaje de los libros de historia”.
Ahora, Fernando del Paso, Premio Xavier Villaurrutia (1966), el Rómulo Gallegos (1982), el Nacional de Ciencias y Artes en la categoría de Lingüística y Literatura y el Premio de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara en 2007 y el Alfonso Reyes en 2013, suma a su prolífica obra premiada el galardón más importante de las letras en castellano, el Cervantes.