Pasen y miren

DONOSTIA

LA margarita de dFeria empieza hoy a deshojarse con cinco propuestas, notables por dos aspectos: es teatro de cantera -hecho en Euskadi, de una y otra manera- y la feria se ha organizado con un presupuesto reducido a la mitad. Las historias, en cualquier caso, no se adelgazan, si acaso se desnudan, como hace Kapzuloa con la sociedad posmoderna.

Esta obra de la compañía vizcaina Koyame abre hoy boca, a las 10.00 horas, en la calle. La directora de Kapzuloa, Oihane Lejarreta, explicó que la obra retrata "la experiencia de vivir en una gran ciudad", donde personas "saturadas de información y publicidad", se refugian en su habitación, "el único espacio libre". La vivencia no es extrapolable a cualquier época, sino que se ciñe a la actual, la sociedad posmoderna, en la que "tenemos de todo pero no sabemos lo que queremos". Y este "todo" está en una "cajita".

Para plasmar esta sensación, Koyame Antzerki Taldea ha escogido, precisamente, una caja, en la que se han colocado estratégicamente mirillas a través de las cuales el espectador contempla la realidad desde el exterior. Esto permite asistir, apuntó el actor Jon Koldo Vázquez, a "dos espectáculos a la vez": los que observan a través la mirilla son, a su vez, contemplados, duplicando el fenómeno del voyeurismo.

El primer pase de Kapzuloa comienza a las 10.00 horas en la plaza Okendo, y la experiencia dura quince minutos, que finalizan con una visita al habitáculo para comprobar lo engañoso de las dimensiones: parece mucho más grande de lo que es (dos metros cuadrados). "La mirilla -subrayó la actriz Maite Bayón Pastor.- es un filtro para la realidad, que no es como la vemos".