Madrid - Jordi Évole asume con "deportividad" las críticas recibidas. "Hemos tratado al espectador como adulto, alguien que es capaz de codificar y entender la información y que siempre saber más de lo que se cree", señala el periodista catalán acerca de las críticas por un programa en el que se presentó al Rey y a la clase política como urdidores del golpe de Estado de 1981, con José Luis Garci como encargado de filmar imágenes que ya son historia. "Sé que en este momento habrá espectadores que estarán contentos con lo que han visto porque se lo han pasado bien y otros que se sentirán engañados y me querrán matar", reflexionaba tras el falso documental: "A los primeros les querría decir que gracias por jugar con nosotros, y a los segundos, que la próxima vez lo intentaremos hacer mejor. Al menos nosotros hemos reconocido que era mentira lo que hemos contado. Seguramente ha habido otras veces que era mentira lo que les han contado y nadie se lo ha dicho" e insiste en que al final de Operación Palace se dijo que el programa era un falso documental. Recuerda también que durante el espacio se daban "pistas" de por dónde iban los tiros: "A los diez minutos se explicaba que la minoría catalana en el Congreso pidió a Josep María Flotats como director (del montaje del 23-F) y que Alfonso Guerra se indignó y propuso a Manolo Summers".
'operación luna' La idea surgió hace tres años, cuando Évole vio Operación Luna, una producción del canal francés Arte en el que se plantea que la llegada del hombre a la Luna fue en realidad una ficción urdida por el entonces presidente de Estados Unidos, Richard Nixon, y rodada en un estudio por Stanley Kubrick. Évole, presentador de Salvados, quiso adaptar a España esta idea para "utilizar todos los elementos que nos da la televisión, jugar con ellos y crear algo nuevo", apunta. También ha pretendido "decirle al espectador que tenga cuidado, que intente contrastar las noticias en medio de este alud informativo en el que vivimos", y que sea "un poco más crítico".
Operación Palace se grabó en julio de 2013, justo después de que José Luis Garci diese el sí a su papel de coordinador de todo el aparato audiovisual del montaje, según el cual el discurso del Rey en la noche de 23-F se habría grabado seis días antes con guion de Ónega, guionista habitual de los discursos de Suárez. "Algunos se echaron atrás, pero no muchos", señaló Évole sobre el amplio reparto de su especial, en el que figuraron también Andreu Mayayo, catedrático de Historia Contemporánea de la Universitat de Barcelona; el exagente de la CIA William Parker y diputados que estaban en el Congreso el 23-F, como Felipe Alcaraz, Joseba Azkarraga o Alejandro Rojas Marcos. Muchos espectadores siguieron como un relato real el espacio Operación Palace, extremo que según Évole da idea de que "no vivimos en el paraíso de la transparencia". "Que 33 años después no podamos ni consultar el sumario del golpe de Estado me parece una anomalía", apunta el periodista, y señala que esa falta de información "puede dar pie a otras teorías conspirativas".
El conductor de Salvados, programa que hoy cumple seis años desde su estreno en La Sexta, apunta que al espacio siempre le ha gustado el "riesgo" y no descarta seguir en esta línea de falsos documentales con otros temas aunque siempre "avisando al espectador". - Efe