BILBAO. La canción fue creada en 1937 por Gustavo Pascual Falcó, un hombre de Alicante que tenía 28 años al componer la obra. La hizo pensando en su cuñado, Francisco Pérez Molina, mejor conocido como Paquito "el chocolatero" en su pueblo. Así, la canción se estrenó en las fiestas de Moros y Cristianos de su pueblo.
Desde entonces y hasta el día de hoy, esta obra con ritmo de pasodoble se sigue escuchando en cada fiesta que se precie. Desde bodas y bautizos a las fiestas de cualquier pueblo, pasando por una versión del mismísimo King Africa.