'El Dioni', de 'Acorralado' a detenido

BILBAO. Dionisio Rodríguez Martín, más conocido como El Dioni, fue detenido por la Guardia Civil mientras concursaba en el reality de Telecinco Acorralados. La policía transportó al participante al juzgado de Piloña (Asturias) para declarar por un delito contra la seguridad vial. Después de la sesión legal volvió al set del programa para continuar con la grabación.

Sobre las cinco de la tarde de ayer se colgaba un tweet en la cuenta oficial del programa de Telecinco que decía "¡El Dioni detenido en Acorralados por la Guardia Civil! Se le acusa de un delito contra la seguridad vial".

En el vídeo que colgó la misma cadena de televisión aún se puede ver cómo el concursante entra en un coche a la entrada de la casa en Asturias donde se hospedan los participantes del show. Al parecer, se trataba de tres agentes, vestidos de paisanos, y en un coche no oficial, los que le arrestaron cuando participaba en el concurso y condujeron al conocido ladrón ante el juez.

El diario asturiano El Comercio anunció ayer que El Dioni pasó veinte minutos declarando. Aparentemente el juez le multó por el delito "relacionado con un exceso de alcoholemia". A renglón seguido, el madrileño pagó la multa y el juez ordenó la retirada de su carné de conducir. Tras cumplir las exigencias del magistrado, este le permitió regresar al programa y seguir como participante.

El programa continuará contando con la participación de El Dioni. Acorralados es un reality de lo más completo en cuanto a emociones se trata. Consiste en "aislar a los participantes del resto del mundo" mientras son grabados por cámaras en todo momento.

Dionisio Rodríguez Martín fue conocido como el ladrón del furgón tras cometer lo que a día de hoy se recuerda como el robo más espectacular de la historia del Estado español.

El 28 de julio de 1989 aprovechó el momento para escapar con 320 millones de pesetas que transportaba en un furgón de la empresa Candi, de la que era empleado de seguridad.

Con el tiempo ha aclarado que consumó el delito "no por amor al lujo, sino por venganza contra la empresa". Al parecer Rodríguez llegó a ejercer de guardaespaldas en la compañía de seguridad, pero las circunstancias -aún por aclarar- le llevaron a ser degradado al cargo de conductor.

A los cuarenta años con un botín de lo que viene a ser casi dos millones de euros, se cuenta que el madrileño se fugó a Brasil donde disfrutó de sus riquezas escondiéndose bajo un peluquín.

La euforia no le duró mucho, pues el 19 de septiembre de ese mismo año fue detenido por la policía brasileña. El hombre que realizó el sueño de muchos pasó diez meses entre rejas cariocas hasta que se produjo su extradición al Estado español donde cumplió el resto de la condena.

En la primavera del año 1995 se le fue concedida la libertad condicional, tras cumplir tres cuartas partes de la pena de tres años y cuatro meses que le habían impuesto. Por otro lado, solamente se pudo recuperar 175 millones de pesetas quedando 145 millones sin justificar su paradero.

Tras la cárcel Una vez puesto en libertad El Dioni decidió sacarle partido a su fama momentánea. Aprovechó para abrir locales hosteleros, se convirtió en colaborador de varios programas de televisión y se dedicó a lo que él definía como "el sueño de mi vida: la música".

No satisfecho aún, se atrevió a desarrollar su faceta literaria. En su libro, Palabra de ladrón cuenta la verdadera historia de lo ocurrido aquel día y asegura detallar "todo lo callado". También hace alusión a lo más interesante de todo: "dónde está el dinero", refiriéndose a la cantidad del que nunca quedó rastro alguno.