Madrid. Esta modelo rusa afincada en Madrid por su relación con uno de los mejores jugadores del club merengue, Cristiano Ronaldo, ha concedido a la revista Glamour su entrevista más sincera destapando lo que no había dejado ver hasta el momento: su vida, su personalidad y sus duros inicios en el mundo de la moda.

Hasta el momento hemos visto a la bellísima modelo como imagen de la firma de lencería Intimissimi, posando muy ligera de ropa para distintas publicaciones y acudiendo para recoger su premio a Rostro Internacional del Año a los Premios Glamour hace unos meses.

Pero, hasta el momento prácticamente nada se conocía de esta escultural rusa de ojos verdes y medidas perfectas, salvo que ha logrado conseguido y enamorar a una de las grandes estrellas del Real Madrid, Cristiano Ronaldo.

Ahora, Irina se ha propuesto a hacer precisamente eso: desvelar su cara más desconocida y contar los detalles de cómo se ha convertido, a sus 24 años, en una de las modelos más cotizadas del mundo, habiendo nacido en "un pueblo en medio de ninguna parte". Desde luego, a simple vista ya se puede adivinar que sus medidas de infarto, sus carnosos labios, sus ojos verdes y ese tono de piel que debe a su padre, "de etnia tártara", son algunas de las características que han hecho de ella una de las mejores modelos del momento.

Duros comienzos Sin embargo, ni siquiera para ella los comienzos en el mundo de la moda fueron fáciles. Nacida en una ciudad a dos horas en avión de Moscú llamada Yemanzhelinsk en la que no había ni colegio ni universidades, Irina tuvo la posibilidad de estudiar en un colegio danés en otra ciudad, donde fue descubierta por su manager. "Nunca pensé en ser modelo profesional", recuerda la maniquí. "Pero siempre tuve claro que no me quedaría en mi pueblo".

Fue precisamente su ambición y la ayuda de su manager, las que hicieron que Irina se trasladara a París para intentar labrarse un futuro como modelo. Aunque confiesa que no fue fácil -"cuando aterricé en París hace cinco años no tenía ni para el metro. Me alimentaba de arroz"-, poco después le llegó su primer contrato con la firma de lencería Intimissimi.

Gracias a este trabajo, y todos los que le han seguido, Irina ha podido recorrerse medio mundo en pocos años y, aunque está encantada, confiesa que "enumerando el itinerario (de su vida), da un poco de vértigo". Ahora vive afincada en Madrid, donde confiesa sentirse muy cómoda. Lo que más le gusta de su nueva vida en España es "el gazpacho y la vida cultural de Madrid y Barcelona" y pasar tiempo con su perro, siempre que su agenda se lo permite.

Polémico desnudo La modelo y el futbolista han estado en boca de todos por sus presuntos planes de boda, sobre todo, tras la conocida paternidad del astro portugués. Sin embargo, el debate no queda ahí, puesto que Cristiano Ronaldo podría haberle pedido a Irina Shayk ser la madastra de su hijo. Recientemente otro tema ha ocupada portadas, el desnudo de Irina en la portada del último número de la revista GQ España. Irina habría sido víctima del photoshop y la negligencia por parte de GQ, según Gael Marie, director de Elite España, quien afirma que el truco fotográfico ha hecho aparecer a la modelo desnuda en 3 de las 14 fotos hechas para Intimissmi.