La Fiscalía francesa pidió este martes una pena de cinco años de cárcel contra el cineasta Christophe Ruggia, aunque precisó que podría cumplirlos en arresto domiciliario, en el último día del juicio contra él por agresiones sexuales sobre la actriz Adèle Haenel, cuando ella tenía entre doce y catorce años.
El Tribunal Correccional de París dejó el caso visto para sentencia, que pronunciará el próximo 3 de febrero.
La Fiscalía pidió la pena de cinco años de prisión, de los que dos quedarían exentos de cumplimiento, mientras los otros tres podría cumplirlos sin ingresar en un centro penitenciario, a través de un brazalete electrónico.
El caso, denunciado en 2019 por la intérprete en un artículo de prensa, marcó el inicio del movimiento 'MeToo' en Francia y abrió la vía a numerosas denuncias contra numerosas figuras del mundo del cine, entre ellas realizadores y actores famosos como Gérard Depardieu.
Agresión continuada
Haenel denunció "acoso sexual" y "tocamientos" sexuales durante tres años, cuando tenía entre 12 y 15, durante y después de haber participado en el rodaje de la película 'Les Diables' (2002).
Ruggia, que tenía entre 36 y 39 años en esa época, niega haber ejercido cualquier violencia sobre ella y plantea que Haenel ha desarrollado una "realidad paralela", según sus declaraciones durante la instrucción del proceso.
La actriz, que ha participado en 34 títulos de cine y televisión, aseguró que Ruggia ejercía sobre ella un dominio que le forzaba a ir a su casa los sábados por la tarde con el argumento de recibir consejos para una eventual carrera en la interpretación.
El proceso se celebra hoy y mañana en el tribunal correccional de París y el director, ahora a punto de cumplir 60, podría ser sentenciado a un máximo de 10 años de cárcel y una multa de 150.000 euros en caso de ser declarado culpable.