Intervinieron todo tipo de profesionales, un científico y algún empresario. Pero el mensaje principal lo pronunció la cofundadora y presidenta de Maite eta Bizi, asociación de pacientes de cáncer de mama metastásico de Euskadi, Inés Padilla. “La incertidumbre es un efecto secundario muy duro que comparten tanto enfermas como familiares, considerando que la esperanza de vida es de cinco años y afecta cada vez a mujeres más jóvenes. Una de cada ocho mujeres padece cáncer de mama. De estas, el 30% desarrolla metástasis incurables, con un índice de mortalidad del 90%”, dijo Padilla visiblemente emocionada. Fue la única persona que recibió una ovación atronadora tanto al salir al estrado como al sentarse. “Necesitamos apoyo tanto para las pacientes, adaptando los puestos de trabajo cuando aún pueden trabajar, como para los familiares, facilitando que puedan acompañar a las consultas y durante los tratamientos, que son duros”, añadió.
Sucedió ayer en el auditorio del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Bizkaia, en el número 20 de Sabino Arana. Maite eta Bizi, con el apoyo de Banco Mediolanum y Asier Eguren, de Teknodidaktika, organizó un encuentro para sensibilizar sobre la enfermedad y recaudar fondos para una más que prometedora investigación que fue presentada ayer.
El evento, moderado por Marian Gerrikabeitia, contó con la intervención de Lourdes Iscar, directora general de Osalan; Miren Alonso, de la entidad financiera citada; y Helena Masanas, de Grupo Solti, organización sin ánimo de lucro radicada en Barcelona dedicada a la investigación médica. Después, el gestor científico de Solti, Antonio Mulero, explicó en qué consiste el proyecto al que se destinarán los fondos destinados. El objetivo es “entrenar” células del sistema inmunológico de las propias pacientes para que reconozcan, ataquen y eliminen los tumores del cáncer de mama Triple Negativo, el más difícil de dignosticar y el de pronóstico más preocupante. Todo un esperanzador reto.
Poesteriormente se desarrolló una mesa redonda con la participación de la psicóloga Esther Álvarez, el empresario Aiman Kaamel y Lorena Pandelo, paciente y miembro de la asociación que ha regresado a su puesto de trabajo. Antes de pasar a las conversaciones del lunch, actuó la rapera, poeta y cantautora de Astrabudua, Lova Lois.
Entre quienes asistieron se contaban los concejales Paula Garagalza y Esteban Goti, o el mago Jon Zabal.
Acudieron Irkus e Ibon Saiz de Murrieta, Amaloa Casanova, Juanjo Larrazabal, José Arregui, Ana Belén Huerga, Ricardo Gómez, Oscar Crespo, José Antonio Solar, Oscar Susaño, María Chanta y Miriam Casas.
Se acercaron Emma Gallo, Laura Gómez, Maite Varga, Félix y Lorena García, María Villarino, Ander Redondo, Sergio Uriarte, Javier Etxarri, Itxaso y Arantza Bururaga, Asier Delgado, Jhoda Kaamel, Iñaki Andueza,Virginia Pons, Fernando García, Alexia Sarmiento, Norberto Muñoz, Luis Felipe Falagan, Sorkunde Solozabal, Olatz Goitia, Itsaso Zabala o Itziar Pradera.