Es, la que se ha librado, a lo largo de los últimos cuarenta años, una hermosa lucha que te atrapa. Les hablo de una idea que nació en los salvajes ochenta del pasado siglo, cuando la heroína hacía estragos y la escasez de conocimientos era un tremendo obstáculo para hacerle frente a ese mundo hostil de las adicciones. Desde entonces la Fundación Etorkintza que hoy preside Juan Pablo Aia Zulaika se ha acompasado a la evolución de la sociedad, sus necesidades y, más en concreto, el abordaje del fenómeno de las adicciones. Así, la Fundación ha acompañado en sus procesos a familias y adolescentes, a personas en situación de riesgo, a personas con problemas relacionados con los consumos de drogas y otros comportamientos asociados, a personas con adicciones y problemas de salud mental, y a personas en situación de exclusión social aportando propuestas desde sus diferentes servicios y recursos.

A lo largo de este año ha surcado el largo río con diversas conmemoraciones hasta su desembocadura de ayer en una cena benéfica que invocó a instituciones, empresas y diferentes entidades. La cita tuvo lugar en Euskalduna Bilbao con Iñigo Iturrate y Begoña Anguisola, como anfitrión y veló por el objetivo de vincular el tejido empresarial vasco con la misión que Etorkintza lleva desarrollando a lo largo de todos estos años. Ya que están, que se sumen, venían a decir. La velada estuvo presidida por el alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, y contó con la presencia del propio Juan Pablo Aia; la directora gerente, Salvia Hierro; y miembros del patronato de Etorkintza como Iñaki Arechabaleta, Ana Aurtenetxe, Teresa Querejazu, Ketxu Esturo o Iñaki Eguiluz entre otros; el vicelehendakari Mikel Torres y los consejeros Alberto Martínez y Nerea Melgosa; la diputada foral, Teresa Laespada o el rector de la UPV/EHU, Joxerramon Bengoetxea entre otras autoridades.

Tras reconocer a todas las instituciones públicas y entidades privadas que han arrimado el hombro en esta batalla incesante, la Fundación quiso otorgar un reconocimiento público a: las personas fundadoras de la Fundación Etorkintza, representadas en la persona de José Aya, hijo del primer presidente de la Fundación; el Ayuntamiento de Kortezubi, con su alcaldesa Karmele Enbeita a la cabeza; la Fundación BBK, representada por la directora de Obra Social, Nora Sarasola y la Red de Atención a las Adicciones (UNAD), con Luciano Poyato al frente. Fue el momento emotivo de la noche.

A la cita no faltaron el presidente de la Cámara de comercio, Juan Ignacio Zudaire, acompañado por una delegación de Petronor; Xabier Legarreta, Maite Iturrate,; el magistrado Juan Martínez Ayala; el presidente de la Sociedad Bilbaina, Juan Goiria, Reyes Villanueva, Olatz Gordoa, Joseba Atxutegi, presidente del Colegio de Médicos, Susana López Altuna, directora general de Osakidetza;. Koldo Berganza, Agurtzane Ortiz, presidenta de la Academia de Ciencias Médicas; Begoña Atxalandabaso, Begoña Ortuondo, Arantza Gandariasbeitia, Juan Luis Román, María Lacarra; el director gerente de Editorial Iparraguirrre, Ibon Mujika; la directora comercial de DEIA, Amelia Sancho de la Garza, Isabel Octavio; el alcalde de Leioa, Iban Rodríguez, Pilar Grados, Magdalena Múgica; la presidenta de Cebek, Carolina Pérez Toledo, Jon Uriarte, Yolanda Díez, Izaskun Rekalde,. Jon Ruiz, Ainhoa Eguren, Pilar Urra, Ricardo Franco Vicario, Concha Arizaga, el artista Darío Urzay, Isabel Iturbe, Anton Elorriaga, Itxaso Bilbao, Virginia Knörr, José María Arriola,Garikoitz Fraga, quien puso tamboril al txistu del aurresku, Carlos García, Afrika Baeza, presentándolo todo, Jesús Gutiérrez, Ana Hormaetxe, Garbiñe Henry, Iñaki Gondra, Juan Pedro Badiola, Iñigo Alonso y toda una reserva de hombres y mujeres que han acompañado durante estas décadas.