Procuremos no desmantelar la trama pero que suba la marea de la expectación. Les leo los últimos renglones del prólogo de El tiempo de las fieras, el último libro de Víctor del Árbol que ayer se presentó en la Biblioteca de Bidebarrieta. “(...) Pasaron horas, o fueron unos minutos, tal vez segundos. Una eternidad. El tiempo se estaba volviendo líquido. Se ahogaba. En su propia sangre. Hasta que dejó de respirar. Y luego, nada.(...)”
No, no puede hablarse de nada a la hora de juzgar la novela de Víctor, a quien ayer le acompañó en la presentación otro escritor, Mikel Santiago. Todo lo contrario. Mikel conoció a Víctor tiempo atrás, en un encuentro de escritores celebrado en Bruselas. El propio Mikel recordó que la novela está espolvoreada de saltos geográficos y temporales y, al leerla en agosto, se preguntaba cómo iba a juntarlo todo. “Y sentí envidia al ver la resolución”, confesó en la presentación de la que bien pudiera considerarse la apertura del ciclo de presentaciones literarias en la Biblioteca de Bidebarrieta, donde Begoña Morán coordina todo entre sombras y con celeridad. No por nada hoy mismo el responsable de proyectos en la Fundación Athletic, Galder Reguera, presenta su última novela, Vida y obra, acompañado por la profesora de Literatura Begoña R. Orbezua. Ya está la película en rodaje.
A las puertas del salón de actos de la biblioteca se encontraba el librero Kepa Torrealdai, acompañado por Nerea Monge para la venta de ejemplares del libro en nombre de Elkar. Mientras Puri Terraces y Patxi Bilbao esperaban a que el técnico Mohamed Ali Ohula les abriese paso al salón, Begoña Igartua compraba un libro y se ponía a hojearlo de inmediato. Corría peligro. No por nada, poco después el propio Víctor explicaba que, a su juicio, el libro es “trepidante y adictivo”.
A la cita no faltaron, además de los ya citados, Iñaki López de Aguileta, Cristina Churruca, el actor Txemi Parra, Mari Carmen Agirre, Belén Picado, Belén Moreno, Argiñe Ahedo, Eduardo Iriarte, Agustín Mamolar, José Luis Muniozguren, Mari Carmen Fuentes, Marta de la Fuente, María José Alonso e Idoia Unibaso, entre otra mucha gente interesada en las obras de Víctor, un autor prolífico.
El propio Mikel, tras una biografía somera a la que añadió que el autor “estuvo casado”, reseñó toda una retahíla de obras del escritor. A buen seguro que la inmensa mayoría de ellas las conocían Laura Préstamo, Amaia Ruiz y Ro Blanco, quienes acudieron a la presentación con varios libros del autor. Se fotografiaron con ellos. Compartían patio de butacas, si me permiten decirlo así, con Javier Aranguren, Natxo Olabarria, Arantza García, Nekane Bilbao, Miren Garay Andoni Zarate, María Ángeles Urizar y otro puñado de gentes que salieron de la presentación con ganas, con muchas ganas. Con ganas de leer, quiero decir. No se asusten.