A lo largo de su corta pero intensa trayectoria como Museo para la interpretación de la historia de la minería del País Vasco, el centro del barrio Campodiego en Abanto Zierbena ha abierto sus puertas a visitantes de todas las edades y procedencias interesados en conocer la implicación que esta actividad económica ha tenido durante siglos en el paisaje y el paisanaje de Meatzaldea. A pesar de las limitaciones planteadas por la pandemia del covid, el museo no ha dejado de reinventarse -gracias al desarrollo de iniciativas a través de Internet y las redes sociales- para mantener e incluso ampliar el número de destinatarios de su mensaje sobre el legado de esta industria fundamental en el desarrollo económico de Bizkaia y Euskadi. Destinatarios que una vez se levanten las limitaciones a la movilidad interterritorial puedan convertirse en visitas presenciales al museo.

Una encomienda que a finales del pasado año encontró un singular aliado en forma de la plataforma de moteros Biker Friendly que tras la visita de algunos de sus miembros a las instalaciones del antiguo matadero de Gallarta y la ekoetxea que se asoma a la corta de la mina Bodovalle plantearon un acuerdo de colaboración con la fundación del Museo de la Minería para que el centro cultural vizcaino pase a formar parte de los lugares de interés a visitar dentro de las rutas moteras que promueven desde su página web y sus redes sociales.

“Para nosotros fue una grata sorpresa el interés que se suscitó por parte de Biker Friendly de contar con nuestro museo como punto de visita a promover entre los usuarios de esta red de aficionados a las rutas en moto cuando se acerquen por esta zona de Bizkaia”, señala Ameli Ruiz, presidenta de la Fundación Museo Minero durante la firma del convenio marco sellado con la plataforma. “Es un contrato anual revisable por el cual el Museo hará un descuento a todos los moteros que presenten el pasaporte que les identifica como miembros de la plataforma”, indica Ruiz quien se felicita porque “sin duda, este acuerdo nos da acceso a un público objetivo nuevo que a su vez se convertirá en un prescriptor de calidad de nuestra oferta museística”.

Hasta el museo gallartino se han acercado desde 2005 varias decenas de miles de escolares, jubilados y jubiladas, profesionales de diferentes materias relacionadas con la historia o las actividades industriales asociadas al hierro y sus labores y asociaciones de todo tipo que han encontrado un hueco en sus programas de actividades para acercarse a uno de los mejores museos mineros del estado para enriquecer su bagaje cultural. Y cómo no turistas, que aprovechan su estancia o su travesía por Bizkaia para acercarse al museo guiados la mayoría de las veces por amistades o por recomendación de personas o círculos de confianza.

Confianza

“Como motero con más de tres décadas de rutas y aventuras, sé que lo que nos gusta a todos es el calor humano y recibir hospitalidad, en nuestros viajes y en el día a día”, señala Ernesto González, creador de la pionera plataforma Biker Friendly , que cuenta en la actualidad con más de 1.200 motoristas asociados, más de 250 establecimientos de apoyo al motero, 44 rutas y más de 260 puntos de interés para visitar por todo el Estado. Una lista de lugares que ahora ha crecido con la incorporación del Museo de la Minería del País Vasco a la que se sumará la Ferrería muskiztarra de El Pobal y la Torre Loizaga de Galdames.

“El objetivo de nuestra plataforma es lograr una colaboración a través de un pasaporte individual e intransferible que sea beneficiosa tanto para el motero como para los establecimientos de todo tipo que atienden las necesidades de estos viajeros bien sea en ruta o en los lugares por donde van a pasar”, apunta González que destaca que en estos momentos “España es un avispero de motoristas que están deseando que se levanten las restricciones de movilidad para poder circular. Algo que vemos en la plataforma ya que donde la gente empieza a solicitar los pasaportes y está planificando las rutas que desea hacer”.

El rutero se hace con un pasaporte que le acredita como usuario Biker Friendly (BF) durante sus dos años de vigencia, o hasta que lo llene de sellos de los centros adheridos. Alojamientos, restauración, talleres, tiendas, concesionarios… forman parte de una red de servicios que obtiene visibilidad en el portal, promoción en sus redes sociales, y posicionamiento en el radar de los bikers de su zona. “En la plataforma, los moteros encuentran establecimientos que previamente hemos visitado y con los cuales hemos tratado personalmente para garantizar que cumple las condiciones que queremos para nuestros usuarios”, remarca González.

La plataforma Biker Friendly reúne toda la información, los enlaces, la ubicación, así como los descuentos a los que pueden acceder y que se recogen en cada ficha del establecimiento amigo, entrando en la web. Cada establecimiento tiene su ficha personalizada dentro de la plataforma y se le ubica por sección de servicios y posicionamiento en el mapa de Biker Friendly. “Logran una publicidad importante y llegan a un cliente que busca los mejores servicios y que además está motivado en dar uso a su pasaporte BF, en busca de los mejores profesionales”, subraya.