Las fiestas del Puerto Viejo de Algorta se caracterizan por su cercanía y estrecho contacto. Pruebas de cuadrillas, certámenes gastronómicos, juegos, bullicio y, sobre todo, un gran ambiente en un marco incomparable como es el bucólico barrio pesquero. Sin embargo, este año todas esas características que engranan las fiestas son imposibles de disfrutar debido a la crisis sanitaria generada por el covid-19.

Por este motivo, en la antesala de lo que debía ser el inicio de las fiestas en condiciones normales -previstas en el calendario desde mañana hasta el sábado-, la comisión de las fiestas hace un llamamiento a la responsabilidad de la ciudadanía. "Así como cada año con vuestra presencia y participación en cada festejo, llenáis el puerto de vida y sois el alma y la imagen de nuestras fiestas, este año os pedimos que llenéis de vida el puerto pero al revés, no acudiendo, no colapsándolo, aunque haya ganas y muchas, no bajéis al puerto, volved a ser el alma y la imagen de nuestras fiestas, os necesitamos a todos el año que viene", subrayan a través de un comunicado.

En este sentido, tras la suspensión de las fiestas, la comisión adoptó la decisión de "no realizar ningún acto, ni pañuelos ni camisetas" y destacan que hay que poner "la vida en el centro de nuestras prioridades" y, al mismo tiempo, solicitan proyectar "una imagen de respeto y preocupación" por el barrio, su entorno y sus vecinos. "No realicemos, promovamos ni permitamos festejos, actos o pruebas que puedan poner en riesgo la salud de las personas y de las vecinos del puerto", concluyen desde la comisión.