Entre las mujeres que se animaron a participar se encontraba Remedios Bolaños. A sus 86 años, es una de las fijas y echaba de menos poder caminar junto a sus amigas. "No sabemos hasta dónde nos llegarán las fuerzas después de tanto tiempo sin andar, pero estamos con ganas", explicó ilusionada antes de dar inicio la caminata. Preguntada por el encierro, la vecina del barrio de San Fausto reconoció que "a mí no se me ha hecho tan duro porque soy muy casera".

Los impulsores de la iniciativa han diseñado rutas saludables por cuatro zonas del municipio: San Fausto, Aramotz, Alde Zaharra y Madalena-Landako. Los itinerarios serán seguros, oscilando entre dos y tres kilómetros de recorrido e irán adaptándose a las características de los participantes. "Estoy mal de las piernas, pero hay que hacer algo. Llevamos tiempo sin salir y tenemos que empezar a coger el ritmo", aseguró Mari Luz Mujika que, a sus 84 años, tomó parte en la cita con la ayuda de un andador.

Con mascarillas y respetando las medidas de seguridad, las asistentes recibieron la visita de Ima Garastatxu, alcaldesa del municipio, y de Julián Ríos, teniente de alcalde, que quisieron dar la bienvenida y estar presentes en el arranque de la jornada. "Sois unas valientes, habéis sobrevivido a un confinamiento y ahora tenéis que salir y disfrutar", animó la primera edil.

Cada grupo realizará la actividad dos veces por semana, de 10.00 a 11.30 horas. En caso de mal tiempo, la actividad se trasladará al frontón de San Fausto donde los asistentes realizarán gimnasia. "Somos todas del barrio y lo pasamos bien. A ver si poco a poco volvemos a la rutina", deseó Teresa Osés en presencia de sus compañeras.

"No sabemos hasta dónde nos llegarán las fuerzas, pero estamos con ganas de andar"

Participante de los paseos adaptados