Oihane Buruaga

Durango - Emprender, apostar y creer que con ganas, ilusión y dedicación todo se puede conseguir. Esto es algo que siguen al pie de la letra los durangarras Oskar Santamaria y Ainara Atorrasagasti. Y lo hacen junto con los otros cuatro socios que dan vida a la cooperativa Dot. Una Agencia de Innovacción y Diseño Estratégico que se ha dedicado durante años a trabajar en el diseño de campañas de diferentes clientes como Unicef, la Universidad de Mondragón, Deusto y el Basque Culinary Center, hasta que un día decidieron tomar la iniciativa y embarcarse en una nueva aventura que les iba a llevar a crear y comercializar un producto propio: hummus de sabores como el curry, remolacha o el original.

Procedentes del mundo del diseño industrial, la idea surgió hace aproximadamente dos años. "Quisimos diversificar el negocio y comenzar un proceso de diseño de producto propio. Reflexionamos mucho y nos fuimos decantándonos por el mundo de la alimentación porque es algo que nos apasiona y comenzamos a analizar productos saludables, orgánicos y sostenibles para el medioambiente", explica Santamaría. Analizando el abanico de productos posibles llegaron al hummus como un producto de mucho interés para la dieta y para el planeta, cuya mayor base es garbanzo y tahína, y que además de ser el componente perfecto para dietas vegetarianas y veganas, es un producto con muchas propiedades nutritivas. De esa forma, comenzaron a estudiar una nueva forma de hacer hummus, siendo conscientes de que "no somos innovadores creando hummus, pero lo que queríamos hacer es un hummus desde un tono mucho más divertido, más fresco y más social", afirman.

Así nace Deep Dip, la primera marca de hummus que han lanzado al mercado. Una gama de sabores como curry, remolacha o el original, que "han sido desarrolladas con recetas naturales y cuyos baremos en cuanto a gustos y texturas han sido perfilados realizando catas a ciegas con amigos y conocidos y mezclando los sabores, dulces o fuertes, llegando a escoger finalmente el sabor que más había gustado", explica Santamaría.

Recorrido Sin embargo, al ser un proceso regulado, el desarrollo previo a la comercialización no es algo que se haga de la noche a la mañana. "Tienes que desarrollar recetas que tienen que poder industrializarse, tener fechas de caducidad amplias, hacer pruebas€", por lo que el camino que han recorrido no ha sido fácil y ha llevado su tiempo, pero finalmente y desde hace aproximadamente cuatro meses el resultado es un producto que ya se puede adquirir.

Cinco hipermercados participan en la prueba piloto de DeepDip con una respuesta y aceptación por parte de los consumidores que por el momento asegura está siendo muy positiva. "Hemos estado en los supermercados, entrando en contacto con la gente, queriendo conocer su opinión y ha sido muy positivo", relatan.

De cara al futuro, no tienen dudas. Por el momento están en fase de implantación, con lanzamientos graduales, y con el objetivo de poder expandirse hacía Madrid, Barcelona y la zona de Levante. Hasta entonces siguen trabajando con nuevas referencias de sabores como la Muhammara o el Baba Ganoush. También están desarrollando más sabores de temporadas como el hummus de piquillo y de mojito, "para recordar esas tardes de verano en las terrazas, cuando cae el sol".

"Comenzamos a analizar productos saludables, orgánicos y sostenibles "

Oskar santamaría

Impulsor de Deep Dip