La sensación de suciedad y de municipio descuidado que genera la colocación de carteles, pancartas u hojas publicitarias e informativas en fachadas, muros, portales y en todo tipo de mobiliario urbano fue uno de los asuntos tratados en la última sesión plenaria de Galdakao. A través de una moción, el grupo socialista solicitó que se aplique “la ordenanza municipal de limpieza, para que se mantenga nuestro municipio limpio de carteles en los lugares no autorizados, y a que sea ejemplar en el cumplimiento de dicha ordenanza”.

Su portavoz, Txema Larrazabal, explicó que la presentación de la iniciativa “se debe al hecho de que hemos recibido quejas recurrentes de vecinos” e incidió en que “en algunos grupos políticos esta conducta es habitual, cuando los cargos públicos deberíamos ser los primeros en ser rigurosos con las normativas que aprobamos”.

Si esta situación se sigue produciendo, “¿con qué legitimidad pedimos a la ciudadanía que lo hagan?”, preguntó, al tiempo que puso en evidencia la paradoja de que “quienes gestionan los impuestos sean los mismos que generan gastos adicionales por tener que hacer frente a estas actuaciones incívicas”.

La moción salió adelante con los votos favorables de PSE, PNV y la plataforma Auzoak que planteó la necesidad de “realizar una reflexión sobre este asunto, empezando por actualizar una ordenanza que, en algunas cuestiones, se ha quedado desfasada”. El resto de formaciones políticas se abstuvo, aunque desde EH Bildu, Asier Eguiraun apuntó que “se podía haber presentado la propuesta en la comisión correspondiente” y añadió que “no vemos sentido a esta iniciativa porque no podemos exigir el cumplimiento de algo que ya se cumple”.

Como una posible vía de solución, el grupo socialista instó a “destinar una partida económica para la instalación de más paneles reservados a la colocación de este tipo de carteles informativos”.