El Ayuntamiento de Bermeo ha aprobado la modificación de la ordenanza municipal del cementerio con el objetivo de reforzar la seguridad jurídica y evitar posibles conflictos familiares en los procesos de exhumación. A partir de ahora, será imprescindible que la persona que solicite la apertura de un nicho para la exhumación de un cuerpo o restos acredite documentalmente que es heredera legal del fallecido, mediante cualquier documento legalmente válido.
Hasta ahora, el reglamento permitía llevar a cabo estas exhumaciones con una simple declaración jurada, un procedimiento que, según el Consistorio, no ofrecía suficientes garantías jurídicas. Esta fórmula se había mostrado insuficiente, sobre todo en aquellos casos en los que el titular del nicho y la persona con derechos hereditarios sobre el difunto no coincidían. La falta de una prueba más sólida ha derivado en ocasiones en desacuerdos familiares, conflictos e incluso incidencias administrativas.
“Son cuestiones del ámbito privado y sabemos que con esta modificación no se podrán evitar todos los conflictos, pero se ha querido dar un paso adelante para ofrecer una garantía a las personas interesadas”, explicó la alcaldesa de Bermeo, Nadia Nemeh Shomaly, durante la sesión plenaria.
Seguridad jurídica
Desde el Consistorio subrayan que se trata de un "asunto especialmente sensible", y que en ausencia de una regulación clara por parte de la legislación general, era necesario actuar a nivel municipal. Con el nuevo marco normativo, además de presentar sus datos y documento de identidad, la persona solicitante deberá aportar una prueba documental objetiva que acredite su vínculo legal con el fallecido, dejando atrás el modelo basado en declaraciones juradas.
El cambio busca ofrecer mayor seguridad jurídica a todas las partes implicadas, prevenir desavenencias familiares y garantizar una gestión más ordenada y transparente de este tipo de trámites.