Las fiestas de San Juan en Leioa se van apagando... Queda una última jornada de actividad y sonrisas tras encender las hogueras anoche, tras vivir un emotivo día del aurresku el domingo y tras brincar y vibrar en los conciertos multitudinarios de Zea Mays el viernes (6.000 personas), de Efecto Pasillo el sábado (hasta 8.000 gargantas) y de la Orquesta Vulkano Show el domingo (7.000).

En realidad, más de un centenar de propuestas engordan el programa festivo que fue descorchado el pasado viernes y que provoca que las cuadrillas se lo gocen, las familias compartan experiencias, las txosnas regalen recuerdos... Pero estas celebraciones leioaztarras enmarcan dos instantes singulares: la noche de San Juan y el Aurresku Anteiglesia, muy propios, muy íntimos. La mística y el embrujo del 24 de junio en el municipio siempre camina con el fiel espectáculo de Hortzmuga Teatroa, que esta vez arrancó desde el Molino Elexalde. Fue una romería cargada de magia, en la que no faltaron los personajes mitológicos. Este año, este montaje artístico fue bautizado como Ilunbeltz y contó con la participación de Txistuman y Gure Ohiturak Dantza Taldea de Leioa. Después, el fuego iluminó la oscuridad; la traca la volvió sonora. También se celebró un akelarre y se bailó con una romería en la zona de txosnas desde la medianoche.

Al rebobinar un poco más, el domingo fue el momento de regresar al pasado, porque como defiende el alcalde, Iban Rodríguez: “La tradición, las costumbres y el arraigo están muy presentes en las fiestas de Leioa. Esa es la esencia del Aurresku Anteiglesia, ese segundo episodio identitario de las jaiak leioaztarras, entre las risas de los niños, la juerga nocturna, el letargo de las mañanas para algunos, las píldoras deportivas, la música que alegra el alma... A las 12.00 horas, tras la misa en la parroquia San Juan Bautista, comenzó la liturgia, basada en una investigación trazada en 1981, con voces de 70, 74 y 104 años, y que se remonta a un rito del siglo XIX. Cuenta la historia que el baserritarra después de hacer los trabajos de casa, los domingos y festivos, bajaba a misa con la etxekoandre y bailaba el aurresku en su honor, y al final bailaban juntos la jota y el arin-arin. Esas canciones sonaron en los pies de los dantzaris en este 2025. El primer edil de Leioa, con la colaboración de la concejala de Cultura de Erandio, Josune Rementeria, vestidos de tradición, encabezaron un acto con los compases de Gure Ohiturak Dantza Taldea, Txikiak Txiki Dantza Taldea, Herriko txistulariak, Orpheo Ganbera Abesbatza, Algortako Kutxus Areatxu Fanfarria, Elizaurreko aurreskuko lagunak y Elizaurreko aurreskuko dantzariak. A la emoción que impregna ya esta captura de época se sumaron las lágrimas del homenaje a José Ramón Learra, Txato, un txistulari de Leioa, muy conocido y querido por los vecinos del municipio, que falleció el pasado enero. “Amigo Txato, en qué estrella estás que cuando cierro los ojos oigo tu txistu sonar. ¡Qué extraño se nos hace bailar sin el sonido de tu txistu, pero estamos seguros de que, desde esa estrella donde estás, nos vas a acompañar. Siempre estarás con y entre nosotros”, entonaron con amor los grupos participantes.

Para hoy

Misa. Coro parroquial y aurresku de honor en la parroquia San Juan Bautista. Desde las 12.00 horas.

Bertsolaris. Nerea Ibarzabal, Peio Lago, Uxue Alberdi y Julio Soto, con temas propuestos por Erlantz Pazos. Desde las 18.30 horas en José Ramón Aketxe.

Chocolatada infantil. En la zona de txosnas, a las 19.00 horas.

Circo. Actuación de Valdemekun (circo y malabares) en Euskal Etxeen plaza, a las 19.00 horas.

Premios. La entrega de reconocimientos del concurso de cuadrillas será a las 20.00 horas en Kandelazubieta.

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Traca final. El fin de fiestas será a las 22.30 horas en el bulevar. Después, seguirán las txosnas abiertas.

Barracas. Será el día infantil.