Supervivientes del medievo. Arte gótico en Las Encartaciones. Así se llama la exposición que acoge hasta fin de mes el Museo de las Encartaciones. Entre las actividades paralelas desarrolladas desde junio destaca la restauración de 11 tallas fechadas entre el siglo XIV y principios del XVI que ya se pueden considerar también supervivientes del paso del tiempo al concluir su restauración.

La iniciativa persigue “no sólo investigar y difundir, sino también recuperar y conservar” en colaboración con el servicio de Patrimonio del Departamento de Euskera, Cultura y Deporte de la Diputación Foral de Bizkaia, “que se ha encargado de restaurar tallas que se conservaban en el Eleiz Museoa-Museo Diocesano de Arte Sacro de Bizkaia y en el Euskal Museoa-Museo Vasco”.

Talleres de restauración ofrecidos por Rocío Fernández Amezua, que ha puesto a punto tres de las piezas por encargo del Museo de las Encartaciones y las Juntas Generales de Bizkaia han permitido compartir “la técnica utilizada para sacar a la luz numerosos detalles ocultos como consecuencia de repintados posteriores y policromías de siglos atrás”.

Fruto de un convenio de préstamo entre las Juntas Generales de Bizkaia y los museos Vasco y Diocesano, excepto La Magdalena, que regresará a Güeñes, el resto de piezas –de Artzentales, Balmaseda Gordexola y Muskiz– se quedarán en el Museo de las Encartaciones para ser incorporadas a su colección artística permanente.