El Ayuntamiento de Durango sigue dando pasos firmes para implantar un sistema de cardio-protección total en el municipio. El objetivo de esta actuación es crear un modelo de prevención encaminado a dar auxilio urgente a personas en situaciones de parada cardiorrespiratoria.

Fue en agosto cuando comenzaron las obras y hace unos días finalizaban los trabajos que han posibilitado la instalación de cuatro desfibriladores en varios espacios públicos del municipio. Ezkurdi, Otamotzena, San Fausto y Madalena cuentan ya con estos aparatos con el objeto de la ciudadanía pueda acceder a ellos con facilidad en situaciones de emergencia.

Se trata de unos dispositivos, instalador en la vía pública, que envían una corriente o descarga eléctrica al corazón para restaurar el latido normal. Si el pulso del corazón se detiene debido a un paro cardíaco, también llamado paro cardíaco súbito o repentino, un desfibrilador puede ayudar a que el corazón empiece a latir de nuevo. Un paro cardíaco súbito es mortal a menos que se trate de inmediato con reanimación cardiopulmonar (RCP) y un desfibrilador. Algunos de estos desfibriladores portátiles también pueden corregir ciertas arritmias peligrosas, como son problemas en el pulso o el ritmo de los latidos del corazón.

Esta medida implantada en la localidad durangarra, se compaginará con la creación de una red de voluntarios capacitados para usarlos de forma correcta y a los que se recurrirá cuando alguna persona en situación de parada cardiorrespiratoria necesite atención. Así, fuentes municipales adelantaron que ahora, el siguiente paso, en enero, tras las fiestas navideñas, será informar a la ciudadanía sobre unos cursillos que se organizarán con el objetivo de formar a la población de su uso en caso de necesidad.

VOLUNTARIOS

Además, la red estará conectada mediante una aplicación. En caso de uso de desfibriladores, alerta a la aplicación móvil de los Voluntarios de la Comunidad, considerando los factores de distancia y respuestas afirmativas.

Estos aparatos no son los primeros que se instalan en el municipio. Concretamente en 2008 se pusieron en funcionamiento los primeros cuatro desfibriladores semiautomáticos en los polideportivos de Landako y Tabira, así como en el campo de fútbol de Tabira y en el de rugby-fútbol de Arripausueta y en 2014 otros dos se instalaron en los coches patrulla de la policía municipal.

El objetivo es saber actuar ante un caso de emergencia para evitar los episodios de muerte súbita, dado que su efectividad es máxima en el momento inicial, disminuyendo rápidamente en los minutos que siguen a un ataque. Esta última actuación llevada a cabo por el Ayuntamiento de Durango ha supuesto una inversión de 18.029 euros.

PROYECTO

Presupuesto. La actuación del Ayuntamiento de Durango para instalar estos cuatro desfibriladores en la vía pública ha supuesto una inversión de 18.029 euros.

Cuatro localizaciones. Estos aparatos se han colocado en los barrios de Otamotzena, San Fausto, Madalena y un cuarto en el parque de Ezkurdi.

Formación. Tras las fiestas navideñas, el Ayuntamiento organizará unos talleres para formar a la población.