Con un asunto como el cambio climático que “está despertando conciencias, aunque no precisamente las de las grandes empresas contaminantes, sino las de personas que buscan cómo compensar su huella”, la fundación Lurgaia ha incorporado en su web –lurgaia.org– una calculadora de CO2 en la que, “con unos cuantos clics, podemos medir esa huella” y resarcirla plantando árboles autóctonos en nuestros bosques.

La entidad, con largos años de trabajo para la regeneración de los bosques autóctonos a sus espaldas –ha plantado cerca de un cuarto de millón de árboles y arbustos de especies autóctonas en las más de 850 hectáreas en Bizkaia, Gipuzkoa, Araba, Asturias o Cantabria en sus 22 años de trayectoria–, ha lanzado este apartado en su web que permite diferentes objetivos. En primer lugar, la calculadora ofrece consejos para minimizar esa huella ambiental. “No se trata de contaminar con la conciencia tranquila sino de compensar lo que ya no podamos reducir” aclara Jon Hidalgo, presidente de Lurgaia.

Asimismo, también da pie a que conocer cómo resarcir las emisiones de CO2 y saber “cuántos árboles debemos plantar para compensarlos, el precio y varias opciones para el pago. Por último, será Lurgaia la que “se encargará de plantar. Pero no cualquier árbol y en cualquier lugar, sino árboles y arbustos de especies autóctonas que se plantarán en el bosque de Undabaso, el futuro bosque mixto más grande de la Reserva de la Biosfera de Urdaibai y el segundo de Bizkaia”, inciden.

El proyecto “trabaja por los bosques locales y su biodiversidad y no por el beneficio económico, como sí ocurre en el mercado de compensaciones tradicional. Estos árboles no se talarán y podrán permanecer absorbiendo carbono cientos de años. Mucho más que compensar emisiones”, según subrayan.

En cuanto a las actividades que promueve la entidad, cabe resaltar que el principal proyecto de Lurgaia es el bosque de Undabaso, en Ibarruri, en de Muxika. Allí, han ido restaurando parcelas contiguas, que en su mayoría se dedicaban a la explotación de pinos y eucaliptos, para crear un área sin fragmentación que permita desarrollar los procesos ecológicos asociados. Undabaso supera las 200 hectáreas y será en el futuro “el robledal mixto más grande de Urdaibai y el segundo de Bizkaia”, detallan.