En el marco de las obras de rehabilitación integral del barrio Aramotz de la villa, durante la jornada de ayer se materializó el desvío del arroyo Larrinagatxu a su nuevo cauce. Una actuación estratégica que supone un paso importante en el transcurso de las obras. “El fin de las obras es mejorar la accesibilidad, la seguridad y la calidad de vida de vecinos y vecinas del barrio Aramotz, un objetivo que estamos cumpliendo gracias a la colaboración entre vecinos y vecinas del barrio y diferentes instituciones”, apuntó satisfecha la alcaldesa de la localidad, Mireia Elkoroiribe.

Y es que, las obras de reurbanización –en las que se están rehabilitando y modernizando las edificaciones– incluía el reencauzamiento del arroyo y forma parte del estudio denominado Aramotz Berritu, realizado en los años 2016 y 2017 por la administración local en colaboración con el vecindario. “La regeneración del barrio Aramotz y de su entorno era algo necesario, y gracias a la labor que tanto instituciones como vecinos y vecinas del barrio han realizado en los últimos años, hoy podemos dar este gran paso. Y no es un paso cualquiera, ya que el proyecto de reurbanización se cimenta en la incorporación de soluciones innovadoras de renaturalización y de gestión del ciclo del agua, y está totalmente ligada a la mejora de la sostenibilidad y resiliencia del barrio”, añadió la primera edil.

Sin embargo, completar el reencauzamiento no ha sido una tarea sencilla y durante las obras han tenido que hacer frente a algunos contratiempos para la ejecución del proyecto, tales como “la aparición de unos residuos de construcción antiguos, la aparición de una línea telefónica que sirve a todo Durango y que se desconocía su existencia, así como las dificultades para el desvío y soterramiento de una línea de media tensión de Iberdrola”, concretó Sara Oceja, concejala de Territorio del Ayuntamiento, quien aclaró que “durante este tiempo se han ido realizando todas las actividades relativas al resto de la reurbanización del barrio, como la renovación de redes, la colocación de sistemas de drenaje sostenible, acabados permeables… Todo de manera coordinada con las obras de rehabilitación energética y mejora de la accesibilidad”.

Fondos Next Generation

Así las cosas, las obras de rehabilitación integral del barrio siguen su curso y se prevé que todas las actuaciones de rehabilitación edificatoria estén finalizadas para octubre de 2025. En lo económico, el proyecto cuenta con un presupuesto superior a los 2,2 millones de euros. En este sentido, cabe recordar que, en relación con las obras de urbanización, el Departamento de Planificación Territorial, Vivienda y Transportes del Gobierno vasco ha destinado 1.250.000 euros para financiar la incorporación de soluciones innovadoras de renaturalización y de gestión del ciclo del agua en la reurbanización.

Asimismo, las obras de mejora de eficiencia energética de los edificios se financiarán con los fondos europeos Next Generation, mientras que la mejora de la urbanización del entorno se eleva a 423.720 euros. La cantidad restante está siendo financiada con fondos municipales. l

En corto

l Rehabilitación Aramotz. Han finalizado las obras del desvío del arroyo Larrinagatxu a su nuevo cauce a su paso por Aramotz. La actuación forma parte del proyecto de reurbanización integral del barrio, en el que se están rehabilitando y modernizando las edificaciones y reurbanizando el entorno.

l Octubre de 2025. Con una inversión que supera los 2,2 millones de euros, se prevé que los trabajos concluyan en octubre de 2025.