Desde ayer por la tarde y con la pertinente inauguración oficial, un Mikeldi de cuatro metros de altura preside la pequeña plaza de Madalenoste en Durango creado por la asociación de escultores Eskuahaldunak. Junto con la exposición Euskal Eskultura Azoka, los escultores han levantado una réplica de madera reciclada del Mikeldi junto con el alumnado de Bachiller Artístico del Instituto Fray Juan de Zumarraga. “Se trata una replica de unos cuatro metros para recuperar así la primera escultura del país que data de hace unos 2.500 años. Visto el escaso respeto mostrado a los antiguos habitantes de Durango y a sus creencias y ahora la insensibilidad mostrada hacia la escultura más antigua, nos han entrado ganas de crear un Mikeldi de grandes dimensiones, con el deseo de recordar y homenajear a aquella gente”, explicó el presidente de la asociación Guille Olmo.

Fue en la Durangoko Azoka cuando se comenzó a diseñar la escultura y sus impulsores tuvieron que sortear el mal tiempo hasta que el pasado jueves finalizaron el trabajo para presentarlo en la tarde de ayer. “Queremos dar a conocer esta figura de Durango que ha estado enterrada en la historia por diferentes motivos y que los jóvenes desconocen. Por ello, nuestra propuesta es que una vez terminada se coloque cerca del Instituto. Por un lado, para que se conozca el trabajo del alumnado y por otro, para que se recuerde dicha escultura”, solicitaron sus creadores .

Satisfechos con el resultado final añadieron que “este Mikeldi es la imagen escultórica más antigua que se conserva en nuestro territorio. Representa a un jabalí, pata de 1,30 m de altura y 1,90 m de longitud, realizada en piedra arenisca” describieron sus escultores.