Un centenario merece su logotipo. En la primera reunión de la comisión de trabajo que celebramos en los locales de Euskal Mendizale Federazioa, en Vitoria-Gasteiz, el 10 de junio de 2021, en el orden del día figuró como primer punto a tratar el encargo de la realización de una marca propia. Lo del logo tiene su importancia, es un registro que queda hueco en la historia.

Última reunión de la comisión de trabajo celebrada en Tafalla el 30-05-23.

Fue diseñado por Gorka Garzón (Bilbao) y Argiñe Uriarte (Getxo), mendizales de espíritu y corazón, que han abrazado con entusiasmo el bonito reto de dar imagen a este hito de nuestra historia. Me cuentan que la convivencia del logo con el escudo original (1924) ha sido básico para ellos.

Izquierda el presidente de EMF, Zigor Egia y derecha el de NMF, Martín Montañés.

¿Y qué nos dice esta simbología que asemeja a dos ojos juntos que ruedan como si de dos ceros unidos se tratase? Para que sea más fácil de entender copio del manual corporativo que nos hicieron llegar textualmente la cita. Dice así: “La marca que se presenta a continuación es la elegida para la celebración de los centenarios de las federaciones vasca y navarra de montaña. O lo que es lo mismo, se cumplen 100 años desde que estas dos federaciones nacieran como la Federación Vasco Navarra de Montaña”.

Además, indican que “con esta imagen queremos evocar el concepto de unión y el motivo que une a las dos federaciones originales: la afición al montañerismo. Los dos ceros juntos pueden llevarnos a recordar a dos alianzas enlazadas. Dos unidades que comparten espacios naturales, proyectos, competiciones… y comparten una fecha de nacimiento y celebración”.

La tipografía es Montserrat Alternates estilo medium; nada tiene que ver con el montañismo catalán. El Pantone verde agrisado del 1 quiere recordar al color del logotipo original de 1924.

Hablando hace unos días con Gorka me dice que los dos ceros que van unidos, casados, se tocan y se quieren, asemejan la simbología del infinito y nos recuerdan que siempre caminaremos juntas las dos federaciones. No en vano somos todo uno, todos, montañismo vasco, pero en dos comunidades autónomas; y ojo, con recuerdo y compañía de los montañeros de Lapurdi, Baxenabarra y Zuberoa, en Iparralde.

Es un número redondo el 100 y a él le sumamos el lema Betidanik Betiko 1924-2024 (De siempre para siempre 1924-2024). Como veis, es el corazón el que nos mueve a los montañeros. Por eso es el deporte más noble, culto y bello, de todos los que existen. La marca está pensada en dos unidades que se juntan y hay un relato visual detrás. Creo que es bonito y elegante.

Es más, cuando en la tercera reunión de la comisión, en los locales del Mendiko Lagunak (Amurrio) el 30 de enero de este 2023, elegimos por unanimidad entre cuatro propuestas. Estábamos catorce montañeros en la reunión y todos votamos por la misma, ésta.

Muchas veces me he preguntado cuál es el primer logotipo de la historia. ¿Acaso una incisión en una piedra? ¿o la cruz latina del cristianismo?. Podemos enorgullecernos de los preciosos logotipos, marcas o escudos que tienen los clubes alpinos vascos. Algunos los coleccionan en álbumes y es un gusto verlo. El Grupo Alpino Goikomendi de Alonsotegi, de manos de Baltasar Zapatero Morquecho, a quien entrevisté en 2016, llevó a cabo una preciosa exposición al respecto.

Las dos federaciones van a sacar unas mochilas bien bonitas con este logo que nos ha atrapado hoy domingo en esta Sección de Historias Montañeras. Daremos información para poder comprarlas.

Los alpinistas vascos ya tenemos un logo que nos lleva al recuerdo de un siglo, y que nos ayudará a caminar otro en adelante.