Recuerdan cómo en 2011, “ya hace más que una década”, alrededor de 50 asociaciones de diferentes tipologías (culturales, sociales, deportivas...) de Gernika-Lumo apoyaron el manifiesto de la iniciativa Bidegorridxe Gernika-Lumon Ekimena, en el que se instaba al Ayuntamiento “a construir una red de vías ciclables para unir los puntos socio-culturales” de la localidad foral, desde las escuelas a la casa de cultura, de los polideportivos al mercado… Sin embargo, y pese a los esfuerzos realizados hasta la fecha, sus demandas “parecen no haber sido atendidas, al menos así lo censuran. Han echado la vista atrás para asegurar que “hasta hoy día no se ha hecho casi nada al respecto”. Es por ello que la plataforma resume la situación en que “el tramo ciclable todavía existente” en Gernika-Lumo “empieza y termina en la nada, y no forma parte de ningún concepto futuro que se pueda visualizar”. A juicio del colectivo en favor del uso de la bicicleta, “se confirma el incumpliendo del compromiso que adoptó el pleno municipal en su día –con todos los votos a favor–, estando el señor Gorroño, alcalde entonces y máximo regidor hoy, al frente de la corporación”.

La situación es, a juicio de la plataforma Bidegorridxe Gernika-Lumon, bastante negativa para el uso de la bicicleta, una modalidad de transporte sostenible que Urdaibai trata de impulsar con diferentes proyectos para asegurar la conectividad entre localidades de la Reserva de la Biosfera. Y exponen su razones que les han llevado a denunciar la inactividad del Ayuntamiento gernikarra. “El único tramo de bidegorri (mal) señalizado en la calle Iparragirre, que servía para unir una parte del municipio con el centro, lo eliminó el Ayuntamiento hace dos años y, en la misma calle, se abrió al público una estrecha acera de uso compartido (y muy peligroso) para peatones y ciclistas”. Asimismo, lo miembros del colectivo afirman que “ahora se ha añadido un ramal al único tramo todavía existente, aislado y de poca utilidad, desde la calle Mestikabaso por las calle Lapurdi y Zuberoa hacia al barrio de Lurgorri”.

“Se ha construido un nuevo bidegorri, publica el Ayuntamiento con orgullo”, tal y como han citado en una nota hecha pública ayer mismo. Sin embargo, su lectura acerca de la puesta en marcha de la infraestructura es diametralmente opuesta. “Lo que se ha hecho es lo siguiente: se ha dividido la acera existente mediante una linea de baldosas rojas, un lado para ciclistas y el otro para viandantes”. De la mima forma, se cuestionan que la señalización del tramo es “inexistente”, al igual que las “señales para el trafico motorizado alertando dónde cruzan las bicis las calles”. Y, “para rematar el desconcierto”, se han colocado, “a modo de separadores de espacios, baldosas utilizadas para dirigir a las personas ciegas, cuando lo que pueden provocar son accidentes de invidentes con ciclistas, cuando no del público en general”. En resumen, inciden en que “el resultado de la última actuación es el siguiente: se ha robado a las y los peatones la mitad de 300 metros de acera. Todo un logro”, ironizan.

Eskola Bidea, “abandonado”

Por último, y “si recordamos lo hablado” con el Ayuntamiento de Gernika-Lumo acerca “del tramo de conexión del bidegorri con las escuelas” de Allende Salazar y la ikastola Seber Altube (dos de los cuatro centros escolares existentes en la localidad foral), “mediante su desarrollo por la calle Mestikabaso, solo se sabe de su olvido total. Pobre Gernika-Lumoko Eskola Bidea, te han abandonado; y con ello, a toda la comunidad escolar”, lamentan.