Laudio

La Cofradía de la Sopa de Ajo volvió ayer a revolucionar los estómagos laudioarras con el reparto de 800 raciones de este suculento plato cocinado por los mejores maestros a los fogones. No en vano, las escudillas con las que surtieron a todo aquel que se quiso acercar a acompañarles a la plaza Aldai se llenaron con las dos recetas que se batieron en el concurso que cada año (excepto los dos del covid) elige la mejor sopa de ajo del mundo. A un lado del ring culinario, la propia Cofradía de la Sopa de Ajo, que ostentaba el título mundial. Y al otro, un aguerrido equipo llegado de Basauri: el grupo Puro Sabor, comandado por Juan Carlos Txirapozu, alias Tximu.

El título se quedó en casa. Jon Solaun y los suyos recibieron más apoyos del público que los basauritarras. Y es que es la gente que prueba los platos a las 20.00 horas, momento en el que se reparte un cacillo de sopa, quien elige el vencedor. Las personas que asisten a la cata, indican cuál de las dos recetas les ha gustado más. La que más votos logra, obtiene el título de campeón mundial de sopa de ajo.

El equipo basauritarra fue el elegido para participar en el concurso entre todos aquellos que durante el año han retado a la Cofradía laudioarra, que no han sido pocos. De hecho, les han llegado peticiones para participar en el certamen desde Salamanca o, incluso, México. “Pero queremos que sea algo más local”, explica Adolfo Guerrero, Fito, alma mater del concurso. Y es que el objetivo principal de la Cofradía de la Sopa de Ajo es “defender” este plato, “queremos mantener la tradición de cocinar esta receta” que humeaba en tantas casas en las que no se podían permitir tirar el pan sobrante. Por ello seleccionaron a los de Basauri. Y no se confundieron. “Hemos ganado pero por muy poco. La votación ha estado reñida”, confesaba Fito minutos después de la votación.

Para los integrantes de la Cofradía, el día de ayer fue largo. Desde la mañana estaban ya montando el chiringuito en la plaza. “Hay que llevar los mostradores, las bombonas, los toldos... Hay quien nos dice: oye, por qué no hacéis esto o lo otro. Pero no nos da para más, la gente no sabe lo que cuesta”, explica Guerrero. La Cofradía de la Sopa de Ajo nace de la asociación Cultural Cosecha 48. Este colectivo está compuesto únicamente por miembros, hombre y mujeres, nacidos en 1948. Sin embargo, para ser parte de la Cofradía de la Sopa de Ajo basta con ser amante de este condimento. “Ha venido una chica de unos treinta años comentándonos que era amante absoluta de este plato. Le he dicho que se haga cofrade, y que si quiere, que nos rete”, afirma el organizador. Eso sí, avisa que solo quieren medirse “a los mejores”.

Precisamente, el equipo basauritarra contra el que compitieron ayer “es la monda. Muy cocinillas. Tienen tirón. Ha venido a verles hasta el ex presidente del Athletic, Aitor Elizegi”. “Este día es muy importante para nosotros”, forma parte del programa de actividades de las fiestas de San Roke de Laudio y llena el municipio de aroma a puchero. l