A pesar de los años transcurridos desde que fuera puesta en marcha la Sociedad Fraternidad Mundaquesa, las instalaciones del Casino de Mundaka siguen siendo toda una institución en la localidad costera. Y, revitalizada la sociedad, un espacio de reunión de numerosas generaciones de mundakarras, que durante los últimos meses han comenzado a organizar diferentes actividades, entre las que destaca la organización de exposiciones artísticas. Y la última muestra en recalar es la de la artista bilbaina Karen Amaia. Titulada Esto no es un árbolEsto no es un árbo, se trata de fotografías que surgen de un viaje virtual realizado a tierras africanas durante la larga pandemia que nos mantuvo encerrados en casa. “Surge del interés por bucear en Google Maps e intentar continuar como fuera con mi quehacer fotográfico en exteriores. Ya que apenas podíamos salir de casa salvo a hacer algún recado o compra”, Amaia se zambulló en Internet para rebuscar “en la orografía de países lejanos” accidentes geográficos -ríos, cañones, deltas, montañas, cordilleras...- que mirado por los ojos de los visitantes se erigen en árboles. Las instalaciones mundakarras recogen unas cuarenta obras.Conocida como Ceci n’est pas une pipe -Esto no es una pipa-, el artista belga René Margritte fue un pintos surrealista cuyas obras forzaban a los espectadores a ver más allá de las imágenes. Salvando las distancias temporales y geográficas, Karen Amaia realiza un ejercicio similar. “Desde luego que el título de la muestra hace referencia a Margritte”, incide. Y todas las imágenes tienen como denominador común “sugerir al espectador que se halla frente a la respresentación de un árbol”, aunque en realidad no sean tal. Y cada imagen ha sido realizada en un país diferente del continente africano, que integra numerosos paisajes en los que Amaia se ha sumergido. Ha pasado de rebuscar en las desérticas áreas del Sahara a escudriñar los exuberantes bosques lluviosos. La paleta de colores es increíble. “Metía muchas horas durante la pandemia, muchísimas desde bien pronto a la mañana hasta la noche, buscando en el ordenador paisajes que me sugirieran un árbol, fue como una especie de escape a la situación que vivíamos”, desvela.

Las capturas de la bilbaina -quien se considera mitad holandesa- de os paisajes africanos con forma de árbol han sido posteriormente tratadas, aunque apenas modificadas. Vistos desde arriba, “descubrí con asombro que, esos relieves constituían auténticas pareidolias de árboles”, desvela. El proceso es desvelado por la propia artista. “Inmersa en este juego mental de encontrar formas reconocibles de ciertos objetos en otros diferentes, y cuidando el encuadre para realzar la similitud de los accidentes naturales con los árboles, fui tomando capturas de pantalla de todos mis hallazgos” para realizar la muestra, que ya ha permanecido expuesta en los espacios de Bilbocentro. A veces con un estilo realista y otras con una concepción más abstracta, centenares de personas han pasado por el Casino mundakarra. “La acogida de la gente está siendo muy buena”, afirma Amaia. Las horas para visitar la exposición son de 11.00 a 13.00 horas y de 17.30 a 20.00 horas.

La exposición Esto no es un árbol será visitable hasta el próximo 8 de mayo e incluso da la opción de realizar visitas guiadas con Karen Amaia. La primera de ellas tuvo lugar el pasado 19 de abril con “numerosas personas participando en la visita. La verdad es que la acogida de Mundaka está siendo muy positiva”, recalca. Y la siguiente cita será este próximo viernes 29 de abril a las 19.00 horas. La propia artista anima a que todo aquel que lo desee se zambulla en los paisajes de África desde la alturas, traten de engañar a su propia mente y vea coloridos árboles de miles de formas.

“La muestra trata de continuar, desde casa frente al ordenador, con la pasión por hacer fotos en exteriores”

“La acogida de quienes visitan la exposición en Mundaka está siendo muy positiva”

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