Vecinos de la calle Somera de Bilbao se manifestaron ayer, sábado, por las calles de la capital vizcaina para denunciar el “deterioro” que sufre la zona durante los últimos años y “la acumulación de basura y suciedad”. “Somera se está convirtiendo en una calle sin futuro. El procedimiento para matar la calle y la expulsión del vecindario está en marcha”, expresaron.Bajo el lema Somera Berpiztu, la protesta arrancó a las doce del mediodía y, tras recorrer el Casco Viejo, culminó frente al Ayuntamiento de la villa.

Los organizadores alertan de “la tensión que generan la venta de droga, las peleas callejeras y los robos”, así como la “escasa disposición del Ayuntamiento para afrontar la problemática”. Según han señalado, la única solución que les proponen es “disponer de mas presencia policial”.

“Para el Ayuntamiento, el Casco Viejo se ha convertido en un territorio en el que todo esta en venta... Por un lado está la turistificación del barrio y por otro la gentrificación de algunas calles. Y estos dos procesos van de la mano y los dos nos llevan a la misma conclusión: la venta del barrio esta suponiendo la expulsión de los vecinos”, añadieron los organizadores de la concentración.

De este modo, han lamentado que la “pasividad” del Ayuntamiento y el “rechazo al clamor de los vecinos han obligado a varios de ellos a marcharse de la calle, vendiendo sus viviendas, muchas de la cuales están siendo adquiridas por un especulador que las está destinando a hacer pisos turísticos”.

Peleas y drogas

Los vecinos de Somera confiesan estar “hartos” del proceso de degradación “que no cesa” y donde la acumulación de basura y de suciedad “ha tenido un desarrollo cualitativo” que dificulta la convivencia. El colectivo vecinal advierte de la tensión que se ha acumulado en la calle con “la venta de droga, las peleas callejeras y los robos”, que sitúan al vecindario “muy lejos” de una solución por la “escasa disposición” del Ayuntamiento a afrontar la problemática, para la que proponen, como “única solución”, disponer de “más presencia policial”. “Esta es una medida destinada al fracaso”, afirman los vecinos de esta calle, al tiempo que lamentan que el Casco Viejo se haya convertido en un territorio en el que todo está en venta”.