MAKING CITIES 2030, organizado por la cátedra Deusto Cities Lab con la colaboración de BBVA, es un proyecto que surge con la idea de acercar a los jóvenes la necesidad de una cultura del desarrollo urbano sostenible en el plano medioambiental, económico, social, y cultural.

Con tal fin, se puso en marcha esta convocatoria dirigida a chicos y chicas de la ESO, con la implicación de sus profesores, para que se enfrentaran a los retos que la sociedad actual y futura demandará, y asumir en primera persona, los retos que tienen por delante y plantear propuestas de soluciones a todos ellos.

"Es muy importante que los jóvenes vean la importancia que tiene el ir planteando un modelo sostenible de ciudad, que vayan planteándose grandes problemas como el cambio climático, la generación de empleo digno, la cohesión social, las migraciones o el diálogo intercultural, a través de la vida en sus barrios y municipios".

Proyectos finalistas

Según el director de Deusto Cities Lab, Roberto San Salvador, la iniciativa despertó un gran interés entre los diferentes centros, "iniciaron el recorrido 40 proyectos en los que han trabajado medio millar estudiantes. Sin embargo, y tras el comienzo de la pandemia, han llegado a término 9 proyectos que han implicado a 70 estudiantes".

Los proyectos finalistas han sido:

1. Plastikomania (Santurtzi). El problema del uso y consumo urbano de plásticos y su presencia en nuestros mares y costas, tema crítico del desarrollo sostenible.

2. El Barakaldo de 2030. 4 retos del desarrollo sostenible a los que buscar solución en el municipio de Barakaldo.

3. Señales de Vida (Bilbao). Los adolescentes protagonistas a implicar en el desarrollo urbano sostenible.

4. Litinerario por la Ciudad (Bilbao). La ciudad de las letras en la base del desarrollo sostenible cultural.

5. Nature Protectors (Bilbao). El reto de naturalizar las soluciones a la degradación medioambiental en las ciudades.

6. Ola Verde (Bilbao). Los consumidores como agentes de desarrollo medioambiental.

7. Trueque y trato (Bilbao). Un espacio diseñado para la mediación y el intercambio en un barrio.

8. Bilbao Txostena. Nuestra ciudad parte del planeta.

9. Galdakano Txostena. Nuestro pueblo es parte del desarrollo sostenible de la tierra.

La clave del futuro se llama sostenibilidad

Los proyectos presentados han versado sobre el desarrollo sostenible, no solo en su ámbito medioambiental, sino también en sus ámbitos económico, social y cultural.

"Es importante que las y los ciudadanos que van a ser protagonistas de la transformación del mundo asuman la profunda interrelación que se produce entre medioambiente, economía, sociedad y cultura en la resolución de los grandes retos que tenemos planteados como seres humanos", en palabras de Roberto San Salvador.

Por su parte, Carlos Gorria, director Territorial Norte de BBVA, y presidente del Jurado -que ha estado compuesto por Arantza Leturiondo, viceconsejera de Planificación Territorial del Gobierno Vasco, Iñaki Garcinuño, presidente de CEBEK, Begoña Guzmán, responsable del Departamento de Cultura para la Transformación Social de UNESCO Etxea, Aitor Acilu. profesor de la Escuela de Arquitectura de la Universidad de Navarra, Rosa Santibañez, vicerrectora de Investigación y Transferencia de la Universidad de Deusto, y Roberto San Salvador del Valle, director de Deusto Cities Lab (secretario del Jurado)- resaltó la alta calidad de los proyectos por su creatividad y por el grado de concienciación en torno al reto de la 'sostenibilidad.

"Es una gran satisfacción comprobar cómo la generación que estará al frente en un futuro próximo es consciente de los retos que acechan a nuestra sociedad, sobre todo, por su imaginación, por su innovación y por su compromiso con la sostenibilidad a la hora de tratar de resolver retos". También quiso añadir que se congratulaba por ello, ya que "para BBVA, la sostenibilidad es uno de los pilares estratégicos y como tal, está presente de forma transversal en todas sus actividades. Como los proyectos con los que nos han sorprendido estos chicos y chicas", subrayó.

Aunque en un principio, los tres primeros premios consistían en un viaje, finalmente y debido a la pandemia, los tres colegios ganadores han conseguido un fantástico dron para realizar fotos aéreas y videos para sus trabajos escolares. Además, todos los participantes se llevarán un set de auriculares.